Un cubano naturalizado estadounidense, con residencia en Florida, fue arrestado por crear y difundir propaganda a favor de la organización terrorista Estado Islámico, según reveló este lunes un medio local.
De acuerdo con una declaración jurada del arresto citada por el canal de televisión Local 10, Jonathan Guerra, de 23 años, promocionaba al Estado Islámico (ISIS, en inglés) desde Florida, e intentó brindar “apoyo material” a la organización terrorista.
Guerra, que se hacía llamar Abu Zahr Al-Andalusi, fue capturado gracias a la intervención de agentes encubiertos del Buró Federal de Investigaciones (FBI) estadounidense.
Nacido en Cuba y naturalizado estadounidense, el hispano “promovió atentados suicidas” mientras disfrutaba de la seguridad de un hogar en la comunidad de Lehigh Acres, en el condado Lee (suroeste).
También, expuso la Fiscalía, el joven promovía atentados suicidas mientras vacacionaba con su familia en Cancún, México.
Guerra llamó la atención del FBI por su papel como jefe de un medio de comunicación no oficial para el Estado Islámico.
Los fiscales federales expusieron que, desde octubre de 2019 en que comenzó la investigación del FBI, Guerra se había comunicado con tres agentes encubiertos en internet y persiguió a dos de ellos “románticamente”.
Durante su comunicación, el joven reveló su verdadera identidad, que incluía imágenes suyas y su papel en la difusión de propaganda a favor de la organización terrorista.
Como resultado de la investigación, fue acusado de crear varios videos promocionando al Estado Islámico, incluido uno bajo el título de “Llamado al Islam” en el que mostraba el Hotel Biltmore, en Coral Gables, ciudad aledaña a Miami.
“La identidad de Guerra se confirmó finalmente a través de sus comunicaciones con (el empleado en línea del FBI), en las que Guerra indicó su papel de liderazgo”, anotó el agente especial del FBI Bryan Hughes.
Guerra, que enfrenta un cargo de intento de apoyo material y recursos a una organización terrorista extranjera designada, utilizó varias tácticas para proteger su identidad, como el uso de criptomonedas, según Hughes.
Este no es el único ciudadano vinculado con el extremismo detectado en Florida. En noviembre pasado, las autoridades federales arrestaron y acusaron a Salman Rashid, de 23 años y residente en North Miami Beach, por solicitar a otra persona información para organizar un ataque con explosivos a dos decanos de universidades del sur de Florida.
De acuerdo con la Fiscalía del Distrito Sur de Florida, Rashid pidió a un agente encubierto del FBI, este último supuestamente relacionado con el Estado Islámico, que miembros de ese grupo terrorista colocaran explosivos contra dos decanos universitarios.
La supuesta acción terrorista iba dirigida contra un decano del Miami Dade College (MDC) y contra otro del Broward College, centros de estudios de los que el detenido había sido suspendido y expulsado, respectivamente.