Un informe sobre Tendencias Globales de Desplazamiento Forzado 2018 de la Agencia de la ONU para los refugiados (ACNUR) señala que 32.091 ciudadanos cubanos recibieron el estatus de refugiados o solicitantes de asilo durante el año pasado.
El informe también precisa que más de siete millones de personas se encuentran en condición de desplazamiento; y que las solicitudes de asilo, en especial de venezolanos y centroamericanos, han aumentado de forma notable.
De ese volumen total, a 5.488 cubanos les fue concedido el pasado año la categoría de “refugiados” y otros 26.603 casos de solicitud de asilo se encuentran pendientes de resolución.
En el caso de Cuba como país de destino, a 287 personas de otras nacionalidades les fue concedido en 2018 el estatus de “refugiados” en la isla, y 32 casos se encuentran pendientes de resolverse.
En su informe, la ACNUR establece claras diferencias entre migrantes y refugiados. Los migrantes son aquellos que "eligen trasladarse no a causa de una amenaza directa de persecución o muerte, sino principalmente para mejorar sus vidas". Los refugiados, en cambio, son "quienes no pueden volver a su nación de forma segura".
Las cifras que aparecen en el Informe de ACNUR responden al año fiscal 2018 (es decir, entre septiembre de 2017 y octubre de 2018), y no reflejan el elevado número de cubanos que en los últimos meses han llegado a la frontera de México con EEUU, después de atravesar varios países de la región.