Escenas de violencia se vivieron este miércoles en la localidad de Vinto, en la periferia de Cochabamba, donde fue quemado el edificio de la alcaldía y una turba retuvo y agredió a la alcaldesa Patricia Arce, de filas del oficialista Movimiento Al Socialismo (MAS) del presidente Evo Morales.
El diario La razón informó este miércoles que las agresiones entre quienes bloquean las calles en demanda de la renuncia de Morales, y quienes defienden su victoria en las últimas elecciones dejaron unos 95 heridos de diversa gravedad.
En imágenes difundidas en las redes sociales se ve cómo arde el edificio de la alcaldía de Vinto, ubicado a 15 kilómetros de la ciudad de Cochabamba. También le lanzaron piedras que dejaron rotas todas sus ventanas.
Los agresores, que acusan a la alcaldesa de haber movilizado personas para desbloquear la zona, aparecen armados con palos y otros objetos frente a las llamas del incendio, recalcó el periódico.
Arce fue agredida por la turba luego de la quema del edificio. La golpearon, bañaron en pintura roja y le cortaron el cabello. Estuvo retenida y luego fue entregada a la Policía.
"Si los vinteños dicen que me vaya, me voy", dijo ante sus captores.
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También circuló un video en redes sociales en el que se ve arrodillado y herido al exdirigente campesino y exviceministro de Interculturalidad Feliciano Vegamonte, ante un grupo de jóvenes armados con palos.
La muchedumbre asaltó el edificio municipal de Vinto, una ciudad de algo más de 60.000 habitantes, que fue incendiado antes de que sacaran a la fuerza a la alcaldesa.
Arce corría descalza por la calle entre empujones, hasta caer al suelo entre una multitud que gritaba "asesina", según mostraron las imágenes de medios bolivianos como los diarios cochabambinos Los Tiempos y Opinión.
Otras ciudades de la región, como la propia Cochabamba y la vecina Quillacollo, registraron fuertes enfrentamientos entre afines a Morales, como cocaleros y mujeres indígenas, y detractores del mandatario, con reportes de decenas de heridos.
La Policía empleó material antidisturbios como gases lacrimógenos para dispersar a los violentos, en disturbios que continuaban por la tarde hora local.
Las protestas se suceden desde hace más de dos semanas en Bolivia después de que oposición y movimientos ciudadanos denunciaran fraude en el recuento de votos a favor del presidente, al que el órgano electoral dio como vencedor para un cuarto mandato consecutivo.
La oposición y los comités cívicos del país no reconocen la victoria, exigen la renuncia de Morales y reclaman nuevas elecciones.
(Con información de Efe)