Un conductor de Uber abusó sexualmente de una pasajera en Fontana, California, pero dijo a la Policía tras su arresto que todo había sido consensuado, mientras las autoridades del estado intentan aclarar qué ocurrió realmente.
La víctima alegó que había pedido el taxi luego de una fiesta en la que bebió más de la cuenta. Al entrar, se quedó dormida y cuando se despertó, estaba teniendo sexo con Alonso Calle, de 32 años.
La empresa eliminó al conductor de su lista de contactos luego del incidente y está colaborando con la justicia en el caso, declaró una portavoz.
El mes pasado, Uber publicó un informe de 84 páginas según el cual en 2017 y 2018 se hicieron casi seis mil informes de agresión sexual en Estados Unidos, incluidas 464 denuncias de penetración o violación no consensuada, 587 intentos de violación y tres mil denuncias de tocar sin consentimiento una parte del cuerpo.
El informe es parte del esfuerzo de la compañía para ser más transparente después de años de críticas sobre su historial de seguridad. Aunque la opinión de la empresa sobre lo raro que son estos incidentes es cierta: esos seis mil del informe ocurrieron en alrededor de 1300 millones de viajes de la compañía, o sea, mucho menos del 0,1% de los viajes.
La compañía de transporte ha anunciado varias adiciones a su aplicación centradas en brindar apoyo a los pasajeros y conductores durante las crisis, incluida la capacidad de enviar mensajes de texto a los departamentos de policía locales y un PIN de cuatro dígitos para verificar que un pasajero esté en el automóvil correcto.
Uber también hizo una prueba para grabar y revisar audio durante un viaje, de modo que pudiera vigilar lo que sucede y pedir ayuda en caso de necesidad.