A 31 años de la Revolución de Terciopelo: fin del comunismo en Checoslovaquia

Este episodio clave puso fin en 1989 al comunismo en lo que entonces era Checoslovaquia y fue uno de los principales acontecimientos que marcaron el final de la Guerra Fría
Imagen de archivo_ REUTERS/David W Cerny
 

Reproduce este artículo

Este martes 17 de noviembre los checos rememoran los acontecimientos de cuando la policía atacó brutalmente a miles de estudiantes que protestaban contra el régimen comunista en la capital checoslovaca. Aquellos acontecimientos provocaron el inicio de nuevas manifestaciones y huelgas con mayores cantidades de participantes, aunque los medios de comunicación de propiedad gubernamental ocultaban los sucesos.

Este fue el comienzo de la Revolución de Terciopelo, el movimiento pacífico que  incidió en que en 1989 el Partido Comunista de Checoslovaquia perdiera el monopolio del poder político, que había mantenido durante 45 años.

La revolución pacífica puso fin en 12 días al gobierno comunista instaurado en este país tras la Segunda Guerra Mundial.

Como cada 17 de noviembre a propósito también del  aniversario del cierre de las universidades por los invasores nazis durante el llamado Protectorado de Bohemia y Moravia en 1939, estudiantes checos depositaron ofrendas florales en la residencia estudiantil Hlávek en Praga.

Este año las autoridades checas, para evitar la propagación del coronavirus, pidieron a la ciudadanía permanecer en casa este día festivo nacional y se organizaron online la mayoría de las celebraciones por el “Día de la Lucha por la Libertad”.

Según un reporte de Czech Radio, el primer ministro Andrej Babiš, “depositó flores en el monumento situado en la avenida Národní Třída de Praga, epicentro de los sucesos del 17 de noviembre del 89”. El citado medio también señaló que “varios políticos recordaron aquel hito histórico, incluido el ministro de Salud, Jan Blatný, quien dijo que la unidad mostrada por los checo durante la Revolución de Terciopelo es necesaria hoy para hacer frente a la epidemia de coronavirus”.

Vaclav Havel, el hombre que lideró la revolución y luego se convirtió en último presidente checoslovaco y primer mandatario checo, en declaraciones a la BBC, recapitulando los hechos de 1989, dijo que "los cambios fundamentales ya ocurrieron. Tenemos libertad de expresión, de reunión, pluralismo político. Si se desea fundar un partido político, es posible. Efectuamos elecciones libres. La economía fue privatizada".

El ex gobernante añadió que "hay miles de personas que trabajan por cuenta propia y miles de pequeños empresarios, que obviamente no existían durante el comunismo".

En sus palabras, "todo eso es bueno, pero no necesariamente significa que esté satisfecho con la situación actual. Me encuentro lejos de estarlo", refirió Havel a BBC hace 11 años atrás.

 

Tags
 

Relacionados