Las críticas en redes sociales al periodista venezolano Ronald Moreno parecen no tener fin. Desde hace cinco días el reportero de Univisión y ex de la oficialista Venezolana de Televisión (VTV) está siendo enormemente cuestionado por lo que usuarios denuncian como una ambivalencia ideológica o una supuesta infiltración del chavismo en el espectro mediático estadounidense.
Para varios, el hecho de que el reportero haya defendido por años, y hasta hace poco, al régimen venezolano y hoy reporte desde Estados Unidos resulta una incongruencia criticable, tanto del propio periodista como del medio que le acoge.
“Qué maravilla esos sueldos de Venezolana de Televisión que le permitían al chavista Ronald Moreno viajar a Italia y Aruba, así como a Houston, Atlanta y Orlando para eventualmente mudarse al imperio! Así es sabroso decir: “Viva la Roboilusión”, ironizó en Instagram la usuaria angiepereztv.
“Estimados colegas de Univisión: tienen a un comunista colado entre sus filas de periodistas. Cuidado y no sea un espía del G2 cubano entre ustedes”, agregó.
Su crítica y denuncia tuvo eco en muchos usuarios de la red social. “Ese es el tipo de personas que pueden ser unos infiltrados sapos del régimen. Los mandan para que se hagan pasar por opositores y lo que sirven es de sapos. Como Luisa Ortega Díaz”, comentó uno de ellos.
Por otra parte, en Twitter, Jesús Medina Ezaine (@jesusmedinae) también criticó el salto periodístico del venezolano. “Ronald Moreno de VTV para Univisión en los Estados Unidos y entonces dónde queda el socialismo que pregonaba y defendía?”, escribió.
Las críticas en las redes van acompañadas de fotos en las que se ve a Moreno en algunos de los viajes que realizó como reportero del oficialismo, así como de un fragmento de video en el que, cuando iniciaba en VTV, defendía al régimen chavista, diciendo que “era uno con el pueblo” a diferencia de momentos anteriores.
Con razón o no, el episodio de críticas en redes sociales contra Moreno recuerda lo que muchas veces ha sucedido a periodistas cubanos o profesionales del mundo del espectáculo que han emigrado a Estados Unidos y se insertan en los medios de ese país, mayormente contrarios al discurso oficialista que solían representar y, no pocas veces, defender.
Además de que casos como esos evidencian la fragilidad del compromiso ciudadano con las ideas que los regímenes de Cuba y Venezuela pregonan, contrario a lo que les gusta presumir, ilustran hasta qué punto las experiencias de las llamadas revoluciones cubana y venezolana han dividido a sus sociedades, cargándolas de actitudes hostiles e intolerantes que desdibujan por momentos las fronteras entre uno u otro bando, ambos dominados por el temor y desprecio al contrario.