Nueva tragedia en frontera México-EEUU: hondureña se ahoga con su hijo en río Bravo

Una mujer hondureña se ahogó junto a su hijo de casi dos años, al intentar cruzar el río Grande, que sirve de frontera natural entre México y los Estados Unidos. El hecho ha traído a la memoria el caso de Óscar Alberto Martínez y su hija Angie Valeria, de 23 meses
Los migrantes centroamericanos arriesgan sus vidas en la peligrosa ruta hacia EEUU
 

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México, 17 sep (Edgardo Ayala).- Una mujer hondureña y su hijo de dos años murieron ahogados al intentar cruzar un río que sirve de frontera entre México y los Estados Unidos, informó la tarde de este martes la cadena hispana Univisión.

El hecho recordó la impactante fotografía de un salvadoreño que también murió en las mismas circunstancias, junto a su pequeña niña, en junio pasado.

Univisión informó que, según relató la familia, Idalia Herrera, de 26 años, llegó a EEUU a finales de agosto con su hijo menor, Iker, de 1 año y 9 meses, con el objetivo de reunirse con su esposo y sus dos hijas, de 7 y 5 años, quienes ya vivían ahí.

Pero fue regresada a Matamoros, México, mientras avanzaba su caso de asilo y, desesperada, decidió volver a intentar cruzar por el Río Grande, donde murió ahogada.

Herrera murió el pasado 11 de septiembre, pero su caso ha sido conocido hasta este martes, y retomado por medios periodísticos internacionales.

Univisión dijo que los agentes de marina de la Patrulla Fronteriza recuperaron los cuerpos, aunque sin especificar cuándo, en un área cercana al arroyo San Felipe, cerca del sector de Del Río, en Texas.

 

 

La cadena hispana añadió que en medio de la tragedia, la familia aún no ha encontrado la manera correcta de contarles a las dos hijas mayores de Idalia Herrera que su mamá y su hermano han muerto.

"El miércoles a la noche tuvimos varias llamadas de la embajada de Honduras. Nos dimos cuenta de que habían fallecido", contó a Univisión Wilfredo Córdova, un familiar de la fallecida.

La muerte de Herrera y su hijo representa nuevamente, un triste recordatorio de la tragedia que viven cientos de centroamericanos que diariamente intentan cruzar la frontera entre México y EE. UU., sin importarles los riesgos que encontrarán en la travesía.

En junio, la imagen de Óscar Alberto Martínez Ramírez, de 25 años, y su hija Angie Valeria Martínez Ávalos, de 23 meses, tirados a la orilla del Río Grande, abrazados, tras morir ahogados, dieron la vuelta al mundo.

El río Bravo o río Grande, dependiendo de en qué país se está, es un imponente afluente que se extiende por algo más de 3.000 kilómetros y que divide Texas, en Estados Unidos, de cuatro estados en México, y donde el peligro siempre está presente, reportó la BBC en junio.

 

Al menos 295 personas han perecido en ese río a ambos lados de la frontera desde enero de 2016, según el registro de la Organización para las Migraciones (OIM) de Naciones Unidas.

Del total, 177 cuerpos han sido recuperados en el lado mexicano de la frontera, dijo la cadena británica.

Las autoridades hondureñas dijeron que ya están en el proceso de repatriar los cuerpos de Herrera y su pequeño hijo, reportaron medios periodísticos.