El Covid-19, la cepa de coronavirus detectada en Wuhan, China, en diciembre pasado, sigue esparciéndose por el mundo con voraz velocidad y cobrando vidas. En Estados Unidos, ya son 17 las personas que han muerto por esta causa hasta el viernes, dos de ellas en Florida.
Otro fallecimiento reciente en la nación norteña se produjo en el estado de Washington, mientras las autoridades federales anunciaban una investigación a un asilo de ancianos en la zona de Seattle, donde se registraron varios decesos. Así lo reporta Telemundo, que además detalla lo sucedido con un paciente fallecido en California.
Según el reporte, las autoridades del condado Placer, en California, cerca de Sacramento, explicaron que el fallecido era de edad avanzada y dio positivo al virus después de regresar de un crucero de la compañía Grand Princess. Como en la mayoría de los casos mortales, la víctima tenía problemas previos de salud.
Tras un examen fue declarada como un caso “presuntamente positivo” el pasado martes y falleció apenas un día después, luego de ser hospitalizada. Las autoridades sanitarias, citadas por Telemundo, explicaron que el paciente estaba aislado en el centro médico Kaiser Permanente Roseville y tenía problemas de salud subyacentes.
A partir de su muerte, el gobernador de California, Gavin Newsom, declaró la emergencia a nivel estatal.
Con la muerte del viernes, el estado de Washington ya suma 11, la mayoría de ellos residentes en el asilo de ancianos Life Care Center, en Kirkland, al este de Seattle. Se estima que el virus pudo haber circulado por semanas en el recinto, sin ser detectado.
Life Care fue multado en abril por deficiencias para el control de infecciones, pero en junio se determinó que había resuelto los problemas. Al igual que California, el estado de Washington y la ciudad de Seattle se han declarado en estado de emergencia. Esto amplía los poderes gubernamentales para la suspensión de actividades, pero hasta el momento no se han dado órdenes directas.