El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE) informó en un comunicado colgado en su página web del arrestó de 39 fugitivos extranjeros, sospechosos o directamente relacionados con violaciones de derechos humanos.
El plan nacional de captura “No Safe Haven” dio como resultado la detención de 30 hombres y nueve mujeres, originarios de El Salvador, Guatemala, China, Liberia, Camboya, Chad, Chile, Colombia, Costa de Marfil, Ghana, Haití, Honduras, Jamaica, Nicaragua, Sierra Leona y Sudán.
El operativo tuvo lugar del 27 al 29 de agosto en las ciudades de Atlanta, Baltimore, Chicago, Dallas, Houston, Los Ángeles, Miami, New Orleans, New York, Newark, Salt Lake City y San Francisco.
Al ofrecer detalles de las violaciones cometidas por los detenidos, ICE señaló que 14 centroamericanos están implicados en el tráfico de personas, que en varias ocasiones eran maltratadas, golpeadas, electrocutadas y asesinadas. Además, cuatro sujetos de África Occidental están acusados de masacres, mutilaciones, reclutamiento de niños y ejecuciones.
Asimismo, cuatro individuos procedentes de China tienen relación con esterilizaciones y abortos forzados, bajo la protección del gobierno y un europeo está acusado de aprovechar su posición en un organismo de seguridad para abusar de opositores políticos.
En el operativo, el ICE trabajó de manera conjunta con el Centro de Violadores de Derechos Humanos y Crímenes de Guerra (HRVWCC), organismo encargado de investigar a delincuentes que mediante bajo perfil o con datos falsos tratan de buscar refugio en territorio estadounidense.
El HRVWCC enfoca sus esfuerzos hacia personas sospechosas o participación confirmada en persecución, crímenes de guerra, genocidio, tortura, ejecuciones extrajudiciales, violaciones graves de la libertad religiosa, mutilación/ablación genital femenina y el uso o reclutamiento de niños como soldados.
Por esos crímenes, ICE ha arrestado a más de 415 personas desde el año 2003.
“No permitiremos que los criminales de guerra y los que violan los derechos humanos usen a Estados Unidos como un refugio seguro, nunca dejaremos de buscarlos ni de intentar que se haga justicia a las víctimas de sus crímenes”, declaró en el comunicado el director interino del cuerpo policial, Matthew Albence.
Actualmente están en curso 170 investigaciones sobre presuntos abusadores y también están bajo análisis más de mil 600 casos para decidir la expulsión del país de presuntos violadores de derechos humanos en 95 países.
