Las dos primeras iglesias católicas que se construyen en Santiago de Cuba en más de 60 años se encuentran hoy en diferentes fases de construcción: la primera, al 80 por ciento de ejecución su casa parroquial, y al 10 por ciento el templo; y la segunda, aunque ya está aprobado el proyecto, sigue pendiente de un nuevo terreno para su emplazamiento final.
La primera iglesia está en el Centro Urbano "José Martí", en la avenida de Las Américas, justo al lado de la estación de policías, en un área de tres mil metros cuadrados.
Según una entrevista del reportero José Roberto Loo, de Cibercuba, al ingeniero Fausto Veloz García, jefe del Grupo de Construcción e Inversiones del Arzobispado, "esta iglesia se llamará la Anunciación de la Virgen María. Está compuesta por un templo y una casa parroquial, donde vivirán cinco sacerdotes. Tendrá biblioteca, sacristía, una capilla, garaje, acceso vehicular, peatonal, sistema de tierra y pararrayos, iluminación interna y externa… Es la primera y más grande iglesia construida después del triunfo de la Revolución" en Santiago.
Como detalle significativo, especifica el ingeniero, es que "esta iglesia estará coronada por la misma estructura metálica que se usó en el altar que se hizo a su Santidad Benedicto XVI, en la Plaza de la Revolución, en ocasión de su visita en marzo del 2012. El templo tendrá cimentación y columnas monolíticas, estructura metálica y cubierta ligera, en este caso tejas metálicas. Está diseñada para soportar terremotos de hasta ocho grados y huracanes de gran intensidad".
Se tiene previsto entregar la casa parroquial en junio de 2019, y el templo para diciembre de 2020. Actualmente están en orden todos los permisos que se necesitan por parte del gobierno para la terminación de dicha obra, que se realiza con medios propios del Arzobispado y en la que laboran aproximadamente 40 trabajadores.
Igual será la segunda iglesia católica que se pretende construir, en este caso, en el Centro Urbano "Abel Santamaría".
Detalla Fasto que “se llamará San José Obrero y la diferencia es que tendrá más área pero la parte construida es básicamente igual. Actualmente estamos en discusión con Planificación Física en relación al terreno que se nos dio, porque es un terreno muy malo, que no lo queremos porque la cimentación costará demasiado, y estamos en conversación pues queremos un terreno más alto”.
Estas dos inversiones, tanto la de la iglesia que hoy se ejecuta como el templo que se levantará posteriormente, se unen a otras que han rescatado parte del patrimonio religioso en Santiago de Cuba, cuya obra insigne en los últimos años fue la reparación capital de la Catedral, que exigió y demandó de varios años de esfuerzos, y que también fue liderada por este grupo del Arzobispado.