El huracán Eta, que batía el martes la costa atlántica de Nicaragua con vientos sostenidos de 140 millas por hora, pudiera hacer un giro sobre Honduras, Guatemala y Belice para salir de nuevo al mar Caribe y tomar rumbo a Cuba y el sur de la Florida.
Así lo prevén los especialistas del Centro Nacional de Huracanes (NHC) en un pronóstico extendido para los próximos cinco días. Su giro muy lento sobre tierra firme en Centroamérica lo debe debilitar desde la actual Categoría 4 con la que tocó tierra el martes hasta la condición de depresión tropical con la que saldría el viernes por la mañana al Golfo de Honduras.
Una vez en aguas cálidas del Caribe, Eta debe reorganizarse mientras toma rumbo noreste con una traslación más rápida y se espera que cruce sobre Cuba en algún punto muy impreciso en este momento que puede estar situado entre Ciego de Ávila y Pinar del Río, para llegar a aguas del estrecho de la Florida el domingo y acercarse a nuestra área el domingo al mediodía como la Tormenta Tropical Eta.
“Se pronostica que Eta recobre intensidad de Tormenta Tropical a medida que cruce sectores de Cuba y se acerque al sur de la Florida este fin de semana”, dijo el Centro Nacional de Huracanes en su Advertencia Nº13 de las 4:00 p.m. del martes.
“Aunque es muy pronto para determinar el tiempo exacto, la magnitud y la localización de posibles impactos por viento y lluvia, intereses en Cuba, el sur de la Florida y Los Cayos de la Florida deben seguir de cerca su progreso”, concluyó la Advertencia del NHC.
La marejada ciclónica es considerada como el mayor peligro, pues se estima que el nivel del mar puede elevarse hasta 5,4 metros en el área bajo alerta de huracán y hasta 3 metros en la zona de Honduras más próxima.
A su paso por Centroamérica, las autoridades de Nicaragua informaron este martes de daños materiales como desprendimiento de techos y caída de postes, árboles y tendido de energía eléctrica, pero no se reportaron víctimas.
Antes de que el ojo del huracán alcanzara la costa en la tarde del martes, el gobierno nicaragüense aseguró que 20 000 ciudadanos de la región caribeña abandonaron sus hogares y se encuentran refugiados en iglesias, escuelas y casas más seguras de familiares.
Las regiones indígenas del norte del país, la zona de mayor riesgo ante Eta, son algunas de las más pobres de Nicaragua y muchas personas viven en casas de madera o construcciones precarias.
Tampoco en Honduras se registraron daños personales. Las ciudades norteñas de Tela y La Ceiba sufrieron inundaciones y algunas comunidades quedaron incomunicadas después de que varios puentes colapsaran por las corrientes de los ríos en el departamento de Copán.
El Salvador declaró alerta roja a nivel nacional por la emergencia, mientras que la vecina Honduras lo hizo en cinco de los departamentos del país. En ambos países también se realizaron evacuaciones de habitantes de las zonas en mayor riesgo.