Varios representantes del gobierno de Estados Unidos se unen para exigir al régimen cubano la inmediata liberación del periodista independiente Roberto Jesús Quiñones Haces, quien fue detenido y golpeado el pasado lunes por la policía política de la Isla, y todavía se encuentra privado de la libertad en una cárcel de Guantánamo, su provincia de residencia.
Quiñones, abogado y reportero para el portal CubaNet, fue arrestado este lunes, y golpeado en el proceso, por la policía política de Guantánamo, mientras intentaba dar cobertura en el Tribunal Municipal de Guantánamo al juicio de Ramón Rigal y Ayda Expósito, una pareja de pastores evangélicos que decidió educar a sus hijos en el hogar y fue condenada a prisión por ello.
El senador Marco Rubio ha denunciado en su cuenta de Twitter que este proceder no es más que la copia de sus predecesores. “Cuba continúa siendo una isla donde la libertad de prensa no existe. Díaz-Canel sigue las órdenes y tácticas de censura de su predecesor”, escribió.
Kimberly Breier, Subsecretaria de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental, también expresó su repulsa ante la arbitrariedad, y utilizó su cuenta de Twitter para exigir al gobierno de Cuba la inmediata liberación del periodista, “quien fue golpeado y detenido por la policía simplemente por hacer su trabajo: tratar de proporcionar información precisa y libre de propaganda del régimen. Apoyamos el acceso de los cubanos a la información. #libertad de prensa”, reclamó.
El Comité para la Protección de los Periodistas también denunció el arresto de Roberto Quiñones y llamó al régimen de la Isla a respetar los derechos de los periodistas.