El gobernante venezolano, Nicolás Maduro, alertó este sábado que considerará como un "acto hostil" la invocación del Tratado de Río (TIAR), luego de que el Parlamento, que controla la oposición, aprobara esta semana la reincorporación del país al pacto de defensa mutua.
"Cualquier intención de aplicar el TIAR dentro de Venezuela debe ser considerado, de acuerdo a la Constitución, como un acto hostil a la soberanía nacional y una agresión al territorio, al pueblo, a la paz y al derecho internacional", dijo Maduro durante un acto con militares en el Fuerte Tiuna de Caracas, el mayor cuartel del país.
"Así va a ser considerado por todos el que pretenda invocar el TIAR dentro de Venezuela, un acto hostil, y así va a ser tratado", añadió el mandatario.
El pasado martes, la mayoría opositora dentro del Parlamento aprobó el retorno del país al TIAR -que abandonó en 2013- durante una sesión especial de calle.
El jefe de la Asamblea Legislativa, Juan Guaidó, reconocido como presidente interino por más de 50 países, solicitó aprobar con moción de urgencia y sin modificaciones esta medida que ya había sido discutida en el pleno el mes pasado.
El TIAR, que contempla la cooperación militar extranjera, "no es mágico", advirtió entonces Guaidó entre los aplausos del millar de simpatizantes que se reunieron en la plaza Alfredo Sadel, en el este de Caracas, para escuchar la sesión celebrada allí y apoyarle.
Pero Maduro calificó hoy esta decisión de la Cámara como "un acto de payasería", al tiempo que acusó a los opositores de hacer "política extremista para minorías".
"Ellos creen que se la están comiendo", dijo antes de alabar la sentencia del Supremo que dejó nula la medida del Parlamento y puso "las cosas en su lugar", según dijo.
Maduro también advirtió que el servicio de inteligencia está listo para apresar "a los delincuentes que pretenden que Venezuela se invada", si así lo llegara a dictaminar la Justicia.
"Tenemos la razón, tenemos la justicia y tenemos la fuerza", agregó.
Estos promotores piden a Guaidó y al total de diputados usar este mecanismo con base en el artículo 187 de la Constitución venezolana que da al Legislativo la potestad para "autorizar el empleo de misiones militares venezolanas en el exterior o extranjeras en el país".
Bolivia, Ecuador, Nicaragua y Venezuela denunciaron el tratado en 2012, cuestionando que no se aplicó en la Guerra de las Malvinas en 1982 entre Argentina y el Reino Unido.
Venezuela atraviesa un agravamiento de la tensión política desde el pasado enero, cuando Maduro juró un nuevo mandato de seis años que no reconoce la oposición y parte de la comunidad internacional porque el chavista obtuvo la reelección en unos comicios en los que se les prohibió participar a los principales líderes opositores.