La Policía ofrece una mala imagen de Nicaragua al rodear una catedral, afirma cardenal

Agentes de la Policía se desplegaron ayer desde temprano por la mañana en los alrededores de la catedral, con decenas de vehículos todoterreno, escopetas y fusiles de guerra AK-47.
La Policía ofrece una mala imagen de Nicaragua al rodear una catedral, afirma cardenal
 

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La Policía Nacional ofrece una mala imagen de Nicaragua al rodear la Catedral Metropolitana de Managua, en busca de personas que se oponen al Gobierno del presidente Daniel Ortega, afirmó este domingo el cardenal Leopoldo Brenes.


"Tristemente damos una mala imagen", dijo Brenes, al ser consultado sobre el amplio despliegue policial ejecutado ayer en los alrededores, luego de que manifestantes autoconvocados se citaron para protestar contra Ortega en los predios de la catedral capitalina.


El cardenal nicaragüense dijo haber recibido unos cinco correos de otros países, "que decían qué triste que se vea la catedral rodeada, no era en persecución de los cristianos, sino porque se había hecho el anuncio de una protesta en los predios, la Policía comenzó a rodear, pero verdaderamente la imagen que damos es muy triste", insistió.


Los agentes de la Policía se desplegaron ayer desde temprano por la mañana en los alrededores de la catedral, con decenas de vehículos todoterreno, con escopetas y fusiles de guerra AK-47, de fabricación rusa.


El despliegue se correspondió con una estricta prohibición que mantiene la Policía de Nicaragua desde septiembre pasado a las protestas contra Ortega, a pesar de las críticas de los expertos constitucionalistas, que afirman que la medida va en contra de la Constitución nicaragüense.


A pesar de la estrategia, un pequeño grupo de estudiantes universitarios logró su objetivo de protestar, para lo cual lanzaron consignas contra el presidente de Nicaragua y alzaron la bandera nacional del país, un acto por el que algunas personas han sido condenadas a prisión.


La crisis sociopolítica que vive Nicaragua desde abril de 2018, ha dejado 325 muertos en los últimos 13 meses, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Organismos humanitarios locales cuentan hasta 568 víctimas. El Gobierno reconoce 199.


También se cuentan unos 809 "presos políticos", de los cuales el Gobierno reconoce menos de la mitad, más cientos de desaparecidos y decenas de miles de exiliados.

 

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