Los representantes en el exterior del presidente del Parlamento de Venezuela, el opositor Juan Guaidó, pidieron este miércoles a Europa que se les reconozca oficialmente para poder investigar el destino de los fondos venezolanos en el extranjero e implementar el plan trazado para el futuro de su país.
Antonio Ecarri, representante personal en España de Guaidó, reconocido como presidente encargado de Venezuela por más de 50 países, y William Dávila, en Austria, hicieron este llamamiento en el Foro Concordia de la Cámara de Comercio de Estados Unidos en España, celebrado hoy en Madrid.
La situación de Venezuela y de su futuro inmediato, el colapso en el que se encuentra el país y las posibles soluciones fueron puestas sobre la mesa en uno de los paneles del encuentro, que estuvo moderado por el director de Negocio y Estrategia Digital de la Agencia EFE, Juan Varela.
En su intervención Dávila consideró que el de Venezuela es un tema geopolítico y un problema del mundo occidental, "y si no lo enfocamos así estamos cometiendo un gran error".
Por eso hizo un llamamiento al reconocimiento oficial de los representantes de Guaidó en el exterior para poder así realizar actividades, ejercer como interlocutores políticos, canalizar la ayuda humanitaria e ir explicando la hoja de ruta para poner fin al Gobierno de Nicolás Maduro y convocar elecciones libres.
Por su parte, Ecarri recordó que desde la época de Hugo Chávez "se dilapidaron más de la tercer parte de los ingresos petroleros de Venezuela, 300.000 millones de dólares", destruyendo empresas como PDVSA.
Por eso solicitó ayuda a los empresarios españoles, sobre todo al sector privado, para avanzar en un futuro "de gran optimismo" que tiene como base la puesta en marcha de un Plan País de Desarrollo.
El economista y profesor del Instituto de Estudios Superiores de Administración (IESA) José Manuel Puente explicó las principales medidas para reconstruir la economía venezolana, que en 2019 entrará en su sexto año consecutivo de recesión.
Esas medidas pasan por la ayuda financiera internacional, la reducción de la inflación, recuperar las bases del crecimiento económico, reforma fiscal integral, desmantelamiento del control de cambio, reconstrucción de la industria petrolera y la reestructuración de la deuda pública.
"Pero para todo eso necesitamos que nos ayuden previamente a hacer una transición política", subrayó.
También participó en el panel expresidente de Bolivia Jorge Fernando Quiroga, quien fue muy crítico con la postura de la comunidad internacional y también con España, a quien pidió que encabece la posición de la Unión Europea (UE).
"La comunidad internacional está muy dividida. Hay que crear un solo centro de gravedad internacional", dijo y advirtió de la necesidad de denunciar "el colonialismo vampiresco que Cuba, Hezbolá, el ELN y los narcos" ejerce sobre Venezuela.
También subrayó la importancia del trabajo en común para ayudar a los refugiados y el congelamiento de cuentas "en todos los lugares y al mismo tiempo".
En ese sentido afirmó que los mecanismos de financiación "tienen que estar en manos de Guaidó, por lo que hay que reconocer a sus embajadores".
La misma petición realizó Carrie Filipetti, viceconsejera para Latinoamérica del Departamento de Estado de Estados Unidos, quien coincidió en su mensaje con el del embajador estadounidense en España, Richard Duke Buchan, presente también en el Foro.
Tanto Buchan, que participó en un debate anterior, como Filipetti subrayaron la importancia del papel de España en la solución a la crisis de Venezuela y la necesidad de apoyar a los representantes de Guiadó en el exterior.
