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A gritos de “Libertad”, cubanos se manifiestan frente a gobierno local en Jagüey Grande

La protesta se suma a muchas otras registradas en las últimas semanas, con reclamos al régimen de "cambio", "libertad" y soluciones rápidas a la crisis que vive la isla

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Protesta en Jagüey Grande
Facebook/Suney San Roman | Protesta en Jagüey Grande

Actualizado: Sun, 10/09/2022 - 13:10

Cubanos residentes en el municipio Jagüey Grande, en la provincia de Matanzas, se manifestaron la noche de este sábado frente a la sede del gobierno local a gritos de “libertad” y golpes de cazuela, en reclamo de mejores condiciones de vida y contra lo que calificaron como una mala gestión gubernamental frente a la crisis que atraviesa la isla.

Varios usuarios de redes sociales dejaron constancia de la protesta y sus reclamos mediante videos. “Pidiendo respuestas, no más muela”, se escucha decir en uno de ellos a una mujer mientras caminaba al parque central de la localidad, frente a la sede del gobierno municipal.

“Jagüey Grande está haciendo historia”, escribió en Facebook el periodista cubano Suney San Roman, oriundo de Jagüey Grande y actualmente radicado en Florida, Estados Unidos, al compartir uno de los videos de la manifestación.

En éste se escucha a los manifestantes corear que “el pueblo, unido, jamás será vencido”, una frase tradicionalmente usada por el oficialismo en sus actos políticos para simbolizar la supuesta unidad totalitaria de los cubanos en torno a la pretendida revolución, pero que hoy aplica para significar la insatisfacción con el régimen y las ansias de cambio de numerosos cubanos que no encuentran más vías de expresión y participación política que la protesta cívica.

La protesta en Jagüey Grande se suma a muchas otras registradas en las últimas dos semanas, sobre todo en La Habana, para reclamar al gobierno soluciones rápidas a la habitual crisis que atraviesa la isla, ahora agravada por los destrozos dejados por el huracán Ian en el occidente cubano, el colapso del sistema eléctrico nacional y sus consecuentes apagones, y una espiral inflacionaria cuyo fin no se vislumbra en el corto plazo.

El régimen ha reprimido muchas de estas protestas con las llamadas “brigadas de respuesta rápida” o “tropas de choque”, contingentes de acólitos y militares vestidos de civil que, armados con palos, no dudan en ejercer la violencia física para silenciar las muestras de disenso y los reclamos de la población.

La organización de la sociedad civil independiente Justicia 11J documentó al menos 28 detenciones de ciudadanos por su participación en las protestas ocurridas entre el 30 de septiembre y el 3 de octubre.

Según dijeron familiares de los encarcelados a la organización, los manifestantes serán juzgados mediante “atestados directos”, un procedimiento penal expedito que pasa de la investigación policial a la vista oral, sin que medien acusaciones fiscales ni procesos.


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