El presidente del oficialista Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (Inder) de Cuba, Omar Venega Echemendía, lamentó la fuga del beisbolista César Prieto, quien abandonó el equipo nacional que participa en el torneo Preolímpico de la Florida apenas llegar al hotel.
“Desde el Inder repudiamos la decisión del pelotero César Prieto, quien abandonó a su equipo pocos minutos después de arribar a la Florida, EEUU”, publicó en Twitter el funcionario del régimen.
Venega reprochó al joven prospecto de Grandes Ligas, que “su decisión incumple el compromiso contraído con su pueblo y país”.
El dirigente deportivo culpó en otro tuit al gobierno norteño, de que los peloteros cubanos quieran irse de la isla a hacer carrera: “La decisión del gobierno de EEUU de invalidar el acuerdo entre la Federación Cubana de Béisbol y la MLB para normalizar la inserción de los jugadores cubanos en ese circuito, estimula al éxodo de nuestros atletas”.
Las razones de César Prieto
Pese todo a lo que diga el directivo del Inder y otros funcionarios del régimen, el jugador de 22 años no tenía por qué dilatar su salto a la Gran Carpa, sobre todo por las dificultades que ponen en la isla a quienes quieren progresar en el deporte.
La televisora local estadounidense, América TeVé, filtró un audio atribuido al segunda base cienfueguero, donde explica las razones de su decepción y motivaciones para fugarse en Estados Unidos. En el mismo se escucha a Prieto explicarle a un conocido que desde la isla lo presionaban con razonamientos como “ten cuidado no te quedes” o “tienes que volver, que tu futuro está aquí”.
Sin embargo, el pelotero agregó que en Cuba lo tenían “dormido” con un contrato que no llegaba nunca. “Llegas aquí y el contrato no está y la Serie entera de nuevo”, se escucha decir al joven.
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“Así estamos viviendo, vamos a ver, asere. Llevo el año entero jugando aquí, cogiendo un sol de ping…, vamos a ver”, vuelve a decir el pelotero dejando entrever la posibilidad de que tendría que tomar una decisión una vez pisara suelo norteamericano.
En febrero del 2021, Prieto había firmado un contrato con los Olmecas de Tabasco de la Liga Mexicana de Béisbol, pero nunca visitó la chamarreta más allá de la foto de rigor. Al estar involucrado en la clasificación olímpica, Cuba le imposibilitó llegar a tiempo a los entrenamientos del team mexicano.
Presión del castrismo a los peloteros
El régimen castrista quiere evitar otro hecho similar y saca al juego hasta a sus diplomáticos en Estados Unidos, quienes se comunicaron con los peloteros y los instaron a “dejar en alto el nombre del deporte cubano”.
Una nota publicada este jueves por el medio de propaganda oficial Cubadebate, da cuenta de “un grupo de funcionarios, [que] en representación de los trabajadores de la Embajada de Cuba en Washington D.C., intercambiaron por vía virtual, con los peloteros”.
La jefa de la “misión cubana” en EEUU, Lianys Torres Rivera, encabezó a los diplomáticos quienes, según Cubadebate, “enviaron un mensaje de apoyo a los deportistas, que ponen sus corazones para dejar en alto el nombre del deporte cubano”.
Incluso antes de que comience la competencia –será del 31 de mayo al 5 de junio–, Torres Rivera felicitó “a los representantes de la pasión cubana, por el coraje, la valentía y el empeño que caracteriza al equipo Cuba”.
La realidad es distinta a la que cuentan los medios del régimen. El gobierno ordenó retirarles los teléfonos a algunos que podrían seguir el camino de Prieto, para que no puedan comunicarse con agentes deportivos en Florida.
El periodista Francys Romero, especialista en béisbol cubano y Grandes Ligas, dio la noticia en el programa Ahora, que conduce Oscar Haza.
Romero –quien reveló la primicia del escape de César Prieto el 26 de mayo–, aseguró que después de la baja del principal prospecto MLB que había en la isla, fuentes cercanas al equipo le informaron que en las tarde-noches solo dan un rato el móvil a los jugadores jóvenes, de quienes sospechan la posibilidad de fuga, y después se lo quitan.
Es una práctica habitual de los agentes de la Seguridad del Estado que controlan las delegaciones deportivas, aplicada a muchos jugadores jóvenes que son posibles emigrantes, para limitar la conexión con el exterior, dijo Romero.
