Amelia Calzadilla de regreso: denuncia nueva posible artimaña del régimen

La madre cubana Amelia Calzadilla, que meses atrás copó la atención pública con una directa en Facebook que denunciaba problemas que aquejan a su familia y a muchos cubanos, este viernes  envió un nuevo mensaje al régimen en el que lo critica por su incapacidad de satisfacer las necesidades básicas del pueblo e idear artimañas para humillar a personas decentes y críticas con la gestión gubernamental.

Calzadilla narró en una nueva directa que trabajadores de la Empresa Eléctrica se presentaron para revisar los metros contadores del consumo eléctrico en su edificio. Los técnicos dijeron hallar que había cables que cargaban parte del consumo de la casa de Calzadilla en el dispositivo correspondiente a unos vecinos médicos que hace más de un mes están fuera de su hogar.

Los médicos, que Calzadilla identificó como trabajadores del hospital CIMEQ de La Habana, al que acuden la cúpula del régimen cubano y otras personas con conexiones políticas, no habían pagado un reciente recibo de luz y la familia de Calzadilla, en gesto solidario, asumió el costo.

“Las personas buenas, honradas y decentes no necesitan ser ‘revolucionarias’ para ser buenas. Les pagamos la corriente. Pero para nuestra sorpresa, tenían más de 700 pesos sin pagar, aunque no estaban en la casa desde hacía un mes”, detalló la joven en la directa, explicando los antecedentes de la visita de la Empresa Eléctrica a su edificio y del hallazgo que tomó por sorpresa a su familia.

Al respecto, Calzadilla aseguró que se trata de una artimaña que pretende incriminar a su familia, porque conectarse a un contador de consumo ajeno es un delito.

“Yo he pedido demasiadas veces que vengan a revisar el metro para que rectifiquen las tarifas exorbitantes que yo pago”, subrayó la joven, al tiempo que mostró los recibos de los pagos del consumo eléctrico de su domicilio correspondientes a los meses de agosto y septiembre del año en curso, que ascienden a 7.809 y 6.772 pesos, respectivamente.

“Pago como si fuera un restaurant, un edificio completo. Nunca he dejado de pagar la luz, con mucho esfuerzo, Hoy quisieron demostrar que estaba enganchada a un vecino, para robarle corriente”, agregó Calzadilla, cuyas denuncias en redes han estado relacionadas con la falta del servicio de gas manufacturado o licuado en su edificio.

Esa carencia, como ha explicado Calzadilla en sus videos compartidos en redes, obliga a su familia y a otras a cocinar con electricidad e incurrir en consumos altamente penalizados por el régimen con la tarifa eléctrica decretada como parte del supuesto reordenamiento monetario y cambiario en la isla.

Tras el alcance que tuvo su anterior denuncia, Calzadilla se reunió tres meses atrás con la jefa del Gobierno del municipio Cerro, en La Habana, quien le prometió una solución a su problema que aún no ha llegado.

“Sigo pagando altísimas tarifas de corriente y sin servicio de gas. Me demostraste, junto con otros tantos, que son demagogos. Hablan y no cumplen”, le dijo Calzadilla a la funcionaria y al resto de los dirigentes cubanos.

“La verdad es que, si el día de mi primera directa yo tuviese esta claridad en las neuronas, no sé lo que hubiera pasado, porque a día de hoy yo siento una decepción tan grande. Siento que en este país solo hay cabida para personas indecentes”.

“Las que cuestionamos lo que está mal, somos sancionadas, humilladas, ultrajadas”, añadió.

Para Calzadilla, el "hallazgo" de los electricistas en su edifico sólo busca incriminarlos a ella y a su familia porque no tienen “ninguna mancha en el expediente” y son “personas decentes que dejaron de creer en la administración del país”.

Sobre la pretendida revolución, sus supuestas conquistas y dirigentes, la joven afirmó que el pueblo cubano le ha dado chance suficiente a los que prometen un futuro mejor de demostrarlo. Y ha sido en vano, mientras la atención médica y la educación van cada vez a peor.

“Sigo sin verme beneficiada de los logros del socialismo. Se supone los bienes materiales estarían en manos de todos, no de algunos”, concluyó Calzadilla.