El senador Marco Rubio respondió al alcalde de Miami, Francis Suárez, con respecto a intervenir militarmente a Cuba ante las protestas que se están llevando a cabo dentro de la Isla.
“Siempre le digo a las personas que las fuerzas armadas de EE.UU. están aquí para defender los intereses del país”, expresó Rubio. Explicó que, si sucede algo en Cuba o alrededor de Cuba que pueda afectar la seguridad nacional de Estados Unidos, las fuerzas militares actuarían de inmediato.
El senador dijo que las tropas estadounidenses no van a estar a la orden de todos “cada vez que hay un problema en el hemisferio o en el mundo”, y que las personas no deberían caer en esa trampa.
“Ya no estamos en esos tiempos”, indicó Rubio. “Abogar por eso (una intervención militar) es crear una esperanza que realmente no creo que sea algo que vaya a ocurrir de un día al otro, o que sea posible”.
Rubio afirmó estar seguro de que el destino de Cuba se va a decidir dentro de Cuba y no a través de la fuerza extranjera, a menos que lo que suceda dentro de la Isla sea una amenaza directa a los intereses nacionales de Estados Unidos.
“No creo que debemos concentrarnos en ese mensaje en este momento”, dijo en Senador como respuesta a la petición del alcalde de Miami, quien exigió una intervención internacional para que el régimen castrista termine.
Rubio sobre ayuda humanitaria en Cuba
“Aquí no hay nada que impida (el ingreso) de medicina y ayuda a Cuba. Es el gobierno del régimen cubano que (…) no quieren permitirlo”, dijo.
Argumentó que, la dictadura insiste en que ellos tienen el mejor sistema de salud y que para ellos sería vergonzoso recibir ayuda humanitaria para Cuba.
El senador dijo que la ayuda si es posible, siempre y cuando se le entregue a las organizaciones internacionales, y no a las organizaciones gubernamentales, ya que quedarían en manos del régimen cubano.
“Aquí el problema es que el régimen cubano no lo quiere permitir, y si lo permiten lo quieren controlar, porque quieren utilizarlo para poder controlar al pueblo, no para ayudarlos”, concluyó Marco Rubio.