La profesora cubana Omara Ruiz Urquiola denunció que este viernes 13 de noviembre fue golpeada y maltratada por un efectivo de la policía del régimen de la isla hasta dañar una de sus lesiones cancerosas y sangrar.
Un oficial de la policía motorizada, de los que llamamos “caballitos”, se comportó como una bestia e hizo sangrar mi cuerpo, dijo la también activista en una directa desde su perfil de Facebook, luego de ser liberada tras horas de detención arbitraria.
Ruiz Urquiola mostró la mancha de sangre en su vestido y explicó que hasta ese momento no había querido ver lo que le hicieron. “No he tenido valor de mirarme. Se dieron cuenta de que metieron la pata. No calcularon que tenía lesiones. Ayer justamente tuve tratamiento”, explicó.
Según su relato, fue el oficial de control de la estación policial de Regla, a la que la llevaron detenida bajo el falso argumento de ser partícipe de una riña tumultuaria, quien vio la sangre.
“Cuando se percataron me mandaron a un esbirro para llevarme a un policlínico y le dije que no. Les dije que haría un documento donde los responsabilizo por todo lo que me hicieron. El mundo tiene que ver lo que nos hacen a los cubanos que pensamos diferente”, contó Ruiz Urquiola, quien fue expulsada el pasado año de su trabajo como profesora universitaria por su activismo e ideas políticas.
Este viernes, una decena de activistas cubanos se plantó afuera de la estación policial de Cuba y Chacón, en La Habana, exigiendo la libertad del opositor Denis Solís, preso desde el lunes anterior.
El grupo de manifestantes pacíficos estuvo integrado, entre otros, por Ruiz Urquiola, el artivista Luis Manuel Otero Alcántara, la poeta Katherine Bisquet, el científico Oscar Casanella y los opositores Jovian Díaz Batista y Osmel Rubio Santos.
Además, iban con la curadora de arte Anamely Ramos, quien al ingresar a la estación para pedir información fue secuestrada, según denunciaron los presentes.
"No nos vamos a ir. Tienen que soltar al Denis. Estamos mucha gente, diverso es el grupo", señaló Ruiz Urquiola en ese entonces a ADN Cuba.
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Hacia la tarde, según reportó la periodista independiente María Matienzo desde La Habana, la policía del régimen apresó a los activistas que se encontraban en las afueras de la estación policial.
"¡Se están llevando a todos los activistas que estaban en Cuba y Chacón!", escribió Matienzo en sus redes sociales.
Posteriormente, el acto represivo fue confirmado por el productor independiente Michel Matos, muy cercano al Movimiento San Isidro. "Atención. Están deteniendo a todos los activistas que estaban en Cuba y Chacón. Esta es la represión desbordada".
Ruiz Urquiola alcanzó a transmitir en directo algunos segundos de la detención policial. En el video se escucha cómo encara al policía que procedió a quitarle el teléfono y detenerla bruscamente, sin reparar en que es una mujer paciente de cáncer.
“El caballito, en su pretensión de quitarme el teléfono, que es mío y lo pagué con mi dinero, razón por la que nunca voy a ceder ni voy a dejar arrebatarme ninguna pertenencia, se me abalanzó, me arrastró, me pasó el brazo. No he tenido valor de ver lo que me hizo ese hombre”, subrayó la activista en la directa que hizo una vez fue liberada.
“Hicieron que saliera sangre de mi cuerpo. Son unas bestias, unos asesinos. Tienen que salir del poder, no puede haber pacto con ellos. Ninguna administración norteamericana, demócrata o republicana, ni la Unión Europea, pueden pactar con ellos.
Díaz-Canel es un asesino. Sólo es la cara nueva de un régimen criminal que agobia a los cubanos. No puede haber ningún tipo de negociación si antes no se reconoce igualdad de ciudadanía y se respetan los derechos de todos los cubanos”, denunció, al tiempo que repasó los diversos problemas y carencias de la sociedad cubana, y que hacen de Cuba un país que necesita cambiar de régimen para poder avanzar.
