Ana Treche Marimón, vecina de Altarriba No. 21, entre Delicias y Diez de Octubre, municipio homónimo, en La Habana, no soportó más tanta desidia y terminó escribiendo a la redacción el periódico oficialista Juventud Rebelde para denunciar "peloteo con la garantía de refrigerador".
Explica en su carta que compró un refrigerador en la tienda La Corona, de Cimex, por 880.25 pesos convertibles (CUC), y aún estando en garantía, el pasado 29 de agosto, comenzó a presentar problemas.
Agrega que ella y su esposo, único sostén de la casa, ambos sexagenarios, están desesperados, pues tienen a la mamá de él, una señora de 91 años, muy enferma y encamada. Y por su padecimiento solo puede ingerir comida batida y natillas o gelatinas, que deben conservar, por lo cual el refrigerador es más que necesario.
Como el 29 cayó sábado, Ana tuvo que esperar hasta el lunes 31. Bien temprano fue hasta fue al taller de garantía, y allí le informaron que el especialista iría a su casa en el transcurso de la semana.
Luego de mucho insistir el técnico se presentó el 9 de septiembre y dictaminó que ya el equipo no tenía solución, por lo que debía llevarlo al taller de garantía "por sus propios medios", para que le dieran un cheque y le devolvieran el dinero. Y tenía que esperar a principios de semana para que estuviera todo listo al respecto.
Relata Ana que el 15 de septiembre llevó el refrigerador al taller, y ese mismo día en la tienda le devolvieron el dinero íntegro. Entonces llamó por teléfono a la corporación Cimex, a Atención a la población, para saber dónde podría adquirir otro refrigerador. Ahí se complicó el asunto: le dijeron que en estos momentos no tienen en las tiendas en CUC. Solo hay en las de moneda libremente convertible (MLC).
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Inmediatamente después de llamó al Banco Central de Cuba para cambiar ese dinero de CUC en MLC, y lo único que le dijeron fue que se dirigiera al banco más cercano para que le orientaran sobre el cambio. Poco convencida con la respuesta, llamó a Atención al cliente del Banco Metropolitano y les expresaron lo mismo.
Sin más opciones se presentó en la sucursal 300 del Banco Metropolitano, y la gerente comercial les dijo que allí no estaba entrando MLC e iba ser muy difícil resolver. Señala Ana que la gerente llamó a otro Banco que está frente por frente a ese y tampoco. No obstante, le recogió fotocopias de toda la documentación y les dijo que fueran el 18 de septiembre, a ver qué había.
Regresó el día señalado pero tampoco podían hacerle el cambio por la misma razón, aunque le pidieron los nombres de las personas con que habían hablado en el Banco Central de Cuba y en el Banco Metropolitano.
Agrega que el 21 de septiembre la llamaron de la sucursal 300 del Banco Metropolitano para que fuera porque había entrado MLC, pero cuando llegó solo tenían para cambiar 45 en MLC. El 28, cuando Ana volvió a llamar, nada aún.
"Hemos estado simultáneamente llamando a Atención al cliente de la corporación Cimex al teléfono 7203 9212, hablando con Yoly y Magdalena, y el día 16 de septiembre nos orientaron que pasáramos por correo todo por escrito, incluyendo fotocopias de los papeles", explica Ana y añade que así lo hicieron.
"Nos comunicaron que se estaban analizando los casos (según ellos, hay varios similares) y nos darían repuesta. El 25 de septiembre se nos explicó que ya los casos se habían pasado a Yusleydis Lezcano, surtidora de las tiendas Cimex".
El pasado 28, día en que escribió su carta, llamó nuevamente y le dijeron que "no hay respuesta aún".
Afirma que ella es consciente de la crisis económica por la que atraviesa Cuba, "y que se necesita de la MLC para comprar en el exterior; pero también hay que entender que yo adquirí un producto con supuesta garantía en una de nuestras tiendas, y hoy tengo el dinero en mano y no puedo resolver nada. ¿Acaso Cimex no puede habilitar solo una tienda en La Habana para resolver estos casos de garantías?".
Lamentablemente el caso de Ana es el de muchos que confiaron y aún confían en un régimen que ha dado muestras de sobras de no cumplir con sus compromisos más allá de sus propios intereses. ¿Ahora quién va a salir en defensa de esta familia cuando la prioridad es recaudar MLC? Queda por ver.