Mientras el régimen de la isla anunciaba este jueves la próxima desescalada de la cuarentena por la pandemia del coronavirus, se desarrollaban varios arrestos arbitrarios y violentos contra artistas independientes y activistas de la sociedad civil. Algunos de ellos, como el artivista Luis Manuel Otero y el rapero Maykel Osorbo, fueron golpeados poco antes de liberarlos.
En la noche de este jueves, la Unión Patriótica de Cuba (Unpacu) denunció el allanamiento de la vivienda del coordinador de esa organización opositora en La Habana, Zaqueo Báez.
La página oficial de la Unpacu, denunció que la policía irrumpió en el hogar de Báez y golpeó a su esposa María Josefa Acón Sardiñas, quien se encontraba junto a su hija.
“Le quitaron el móvil durante la detención. Se encuentra en paradero desconocido. Estas acciones son al parecer parte del operativo que el régimen está desarrollando para impedir acciones de protesta convocadas por José Daniel Ferrer en solidaridad a Keilylli de la Mora, joven activista presa política que cumple hoy una semana en huelga de hambre y sed”, aseguraron.
Hasta el momento no se tienen noticias de Zaqueo Báez. Según la Unpacu, además la sede principal del grupo, en Santiago de Cuba, se encontraba “sitiado por tropas especiales del Ministerio del Interior”.
Otro arresto violento ocurrió en La Habana, contra el artista contestatario Luis Manuel Otero Alcántara y el rapero Maykel Castillo, alias Osorbo, quienes fueron liberados en la madrugada de este viernes y denunciaron una golpiza de “la policía racista”.
En fotografías y videos publicados en redes sociales esta mañana, se les puede ver con heridas todavía sangrantes. Según los artistas, fueron agredidos por una decena de policías en la unidad ubicada en la esquina de las calles Cuba y Chacón (Habana Vieja), adonde fueron llevados arbitrariamente la noche del jueves.
Según Otero Alcántara, cuando estaban “un grupo de gente del barrio, intelectuales, artistas, descargando” y Maykel Osorbo se baja su mascarilla sanitaria para comer un pan, llegó una auto patrullero.
Un policía dijo al rapero “que el día antes lo había mandado a ponerse una camisa, cuando él estaba en la puerta de su casa”, orden que fue obedecida. Pero el jueves, el agente llegó dispuesto a llevarse a Maykel Osorbo y aludió a que no tenía el “nasobuco”.
Luis Manuel Otero critica que estén “llevando a jóvenes” y multando en Cuba por ser sorprendidos sin mascarillas, aun en breves momentos de descuido para fumar o comer algo.
Los artistas intuyendo el desenlace del incidente, y convencidos de que el agente “estaba encarnado” en el rapero, comienzan a filmar con móviles, pero el policía dice que no tienen ese derecho y apresan también Otero Alcántara.
Mientras los conducían sin resistencia por parte de los detenidos, el artista visual les dice que ese arresto sin motivos también es una “muestra de racismo”, y que ellos solo eran opositores a “la dictadura”.
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Al llegar a la estación y todavía en la patrulla, según el testimonio de los activistas, cuando Osorbo intenta apagar su teléfono móvil el policía blanco que maneja el auto se lo impide la emprende a golpes contra el rapero. En ese momento Otero comienza a empujar cuando vio el abuso contra su compañero, por lo que la emprenden contra él con las tonfas.
Los artistas mostraron los golpes en manos, rodillas y piernas. “Nos tiran al piso y empiezan a darnos tonfazos unos diez policías que se acercan”, dice Otero.
La agresión habría ocurrido mientras ellos estaban reducidos y con esposas en las manos: “uno apenas se podía defender para esquivar los golpes”.
Luego de dos horas detenidos, llegaron agentes de la Seguridad del Estado, quienes los amenazaron con un juicio próximo, presuntamente por maltrato a la propiedad.
“Este es un régimen represivo y policial, hay un policía en cada esquina y en cada cubano ven un delicuente”, afirma Luis Manuel Otero en la directa publicada en YouTube y Facebook.
Los artistas también denunciaron que cuando la curadora y crítica Anamely Ramos, intentó averiguar en el cuartel policial por sus amigos detenidos, también fue tirada contra el piso por una agente.
