Otro feminicidio ocurrió este miércoles, en horas de la tarde, en las inmediaciones de la piscina olímpica, ubicada en la localidad La Juanita, provincia de Cienfuegos.
Según relatan los vecinos de la zona, entre las dos y las tres de la tarde un hombre acuchilló a su pareja alrededor de 17 veces para luego observar cómo esta se desangraba.
El asesino huyó después con el arma homicida y atravesó la pista de carreras cercana a la piscina. Poco tiempo transcurrió antes de ser apresado por las fuerzas policiales.
Hasta el momento no existen informaciones que precisen más detalles sobre la víctima y su victimario, exceptuando que este último parecía tener trastornos psiquiátricos.
Este caso se suma a uno ocurrido el pasado domingo en el poblado de Güira de Melena en la provincia de Artemisa. Allí una mujer embarazada fue asesinada por su expareja, quien acababa de salir de prisión, aunque no detallan los delitos.
El grupo YoSíTeCreo Cuba informó que las autoridades policiales apresaron al agresor y también amenazaron con altas multas a las personas de la comunidad que publicaran información al respecto en redes sociales.
El aislamiento social que vive Cuba por la propagación de la epidemia de la COVID-19 ha generado un desborde de la violencia doméstica en el país. El primer feminicidio registrado, después de entrar en vigor las medidas de distanciamiento, ocurrió el 16 de abril en la comunidad rural el Indio, en Amancio, Las Tunas, explicó en un reporte la agencia Inter Press Service (IPS).
Según IPS, varias personas de Las Tunas "reportan la muerte de una mujer y sus dos hijas, de dos y cinco años de edad, supuestamente a manos del exesposo, que ya no vivía con ellas".
Ese mismo día, pero en el asentamiento informal y precario de Indalla, en el municipio habanero de Marianao, medios independientes informaron presuntos abusos sexuales a dos adolescentes por parte de oficiales de la Policía.
De acuerdo con el relato de los familiares de las víctimas, ambos policías habrían abusado sexualmente de las dos menores, a pesar de su resistencia. Tras la violación, las niñas fueron abandonadas en las cercanías del estadio del Palmar, en Marianao.
En la Isla, incluso la directora del Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex), Mariela Castro Espín, ha negado la más letal de las formas de violencia de género: el feminicidio. La hija del general Raúl Castro declaró en 2015 al diario Tiempo Argentino que en la Isla no ocurrían femicidios. "Porque Cuba no es un país violento, y eso sí es un efecto de la revolución", dijo.
El régimen cubano también ha hecho caso omiso a la solicitud de la sociedad civil de la Isla de considerar la aprobación de una ley integral contra la violencia de género en el país.
El 21 de noviembre del año anterior 40 mujeres cubanas, entre las que había periodistas, activistas, profesoras y artistas, entregaron a la Asamblea Nacional del Poder Popular una Solicitud de Ley Integral contra la Violencia de Género. Sin embargo, aparentemente el Parlamento ya había decidido que no tendría en cuenta nada parecido a una norma contra la violencia machista.
Pocas semanas después, cuando la revista digital El Toque tuvo acceso al programa legislativo de la Asamblea hasta 2028, quedó claro que los diputados cubanos no considerarían una ley contra la violencia de género.