La activista cubana Daniela Rojo renunció este martes a su puesto como coordinadora de la plataforma Archipiélago, que impulsó la llamada Marcha Cívica por el Cambio el 15 de noviembre.
En una publicación de Facebook, Rojo aseguró que su decisión se basó "a raíz de problemas personales y familiares (...) No he tenido ningún problema con los miembros de la plataforma, a los que abrazo fuertemente y les dejo saber que ha sido un gran placer para mí pertenecer a un equipo tan entregado".
Rojo explicó que se retira del activismo público.
"Como madre he de admitir que hay ciertas prioridades que mantengo y que no puedo seguir posponiendo. Mi salida de Archipiélago no tiene nada que ver con un cambio en mis ideas o en mi posición política, pero necesito abrigar a mi familia, la que más ha sufrido este proceso, en especial mis niños", agregó.
De acuerdo con Rojo, "utilizaré mi tiempo para colaborar en otras funciones, útiles también, pero quizá no tan perseguidas por la Seguridad del Estado como lo está en estos momentos Archipiélago".
"Mi respeto a quienes continúan en ese y todos los proyectos de la causa de la libertad de Cuba, a la que aún me debo. Seguiré abogando desde mi trinchera por una Cuba plural y democrática y en especial por la liberación de todos los presos políticos", concluyó.
Rojo fue víctima de un secuestro de la Seguridad del Estado desde el 12 de noviembre pasado hasta el 17 de noviembre. Agentes de la Seguridad del Estado la trasladaron a una 'casa de protocolo' en las afueras de La Habana durante cinco días, denunció en redes sociales.
El 20 de noviembre también dejó la plataforma Archipiélago el historiador e investigador social Leonardo Manuel Fernández Otaño.
"Cada ser humano es libre de elegir su camino, eso lo respeto profundamente y apoyo, pero cuando se inicia una opción debemos ser consecuentes con ello", escribió Fernández Otaño a raíz de la salida del país del dramaturgo Yunior García Aguilera, principal líder de la Marcha Cívica.
Según dijo en su post, la vocación que le llevó a entrar a Archipiélago sigue viva, por lo que seguirá apoyando la construcción del tejido social, pidiendo la liberación de los presos políticos y animando a la reflexión ciudadana.
García Aguilera salió del país el pasado 16 de noviembre, solo un día después de la Marcha Cívica por el Cambio que él impulsó. La decisión del artista causó revuelo en redes sociales, e incluso la plataforma Archipiélago había denunciado su desaparición forzada.