El cantautor cubano Amaury Gutiérrez está convencido de que algo cambió definitivamente en Cuba, el pasado 11 de julio. Tras el levantamiento popular ocurrido en decenas de localidades del país, opina el conocido artista exiliado que no queda otro camino que salir de la dictadura más larga del hemisferio, aunque lamenta la inacción del gobierno de Joe Biden respecto a los últimos acontecimientos en Cuba.
“Lo más trascendental y alegre de todo este asunto (porque después vino la reacción de la dictadura que esperábamos) es la liberación espiritual, en la mente, el cambio de actitud de la sociedad cubana”, dijo a ADN Cuba el artista ganador del Grammy Latino.
Gutiérrez añade que “lo más alentador de todo es que eran jovencitos, había chamaquitos de menos de 20 años, flaquitos, sin camisas…” en las masivas manifestaciones.
Él no esperaba que algo así ocurriera pronto, confiesa. “Esto es una sorpresa para todos, y sobre todo para ellos [en el régimen]: están muertos de miedo, por eso han tenido esa reacción brutal”.
Hasta este domingo hay 484 personas detenidas y desaparecidas, según la ONG Cubalex, a una semana del inicio de las protestas duramente reprimidas por el régimen.
“Lo más esperanzador es el cambio de actitud a nivel individual y colectivo en Cuba, algo que yo pensaba que no lo iba a ver en vida”, acota Gutiérrez, quien demanda más apoyo del mundo y en particular del gobierno de Estados Unidos.
“El problema fundamental para las marchas es que esa gente no tiene armas y se están enfrentando contra un monstruo armado dispuesto a disparar a matar.
“Yo lo que siento es una impotencia tremenda, porque además con esta administración [de Biden] no se puede contar. ¡Ya pasó una semana! Era para que les hubieran puesto internet [satelital a los cubanos] como hicieron con Puerto Rico… Por lo menos internet para que ellos puedan transmitir el horror que están viviendo en vivo, pero ni eso. Todo es muy lento”.
Gutiérrez, nacido en 1963, es uno de los primeros artistas de su generación en criticar frontalmente al régimen. Ahora ve como cada vez más personas y figuras públicas pierden el miedo a expresarse: “Se ha convertido en una tendencia y es buenísimo. Todo en la vida tiene un momento. A los que van dando el paso hay que agradecérselo y aplaudirlos y sumarlos a nosotros.
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“Yo no soy de machacar a nadie, nosotros nacimos ahí también [en Cuba] y nacimos esclavos. Para quitarte toda esa inyección ideológica que ellos te metieron lleva tiempo, eso no es fácil”. Por eso, opina que “el objetivo de nosotros es liberar a Cuba y tenemos que estar unidos todos”.
Mujeres al frente de la lucha
Amaury Gutiérrez conversó con ADN Cuba en el Big Five Club de Miami, durante un evento dedicado a las mujeres que sufrieron cárcel en la isla por motivos políticos. Allí se recaudaron fondos para un audiovisual que será dirigido por Lilo Vilaplana, quien ya realizó la película “Plantados”, con similar tema.
El cantautor cree que “hay que tener mucho valor para enfrentarse a ese sistema [castrista] y siendo mujer más todavía”. Opina que espera desde hace tiempo una película sobre esas patriotas, aunque “nunca es tarde para reconocerlas”.
“Desde hace tiempo las mujeres son las que han dado el paso en Cuba, ahí están las Damas de Blancos y muchas más que ves incluso batidas contra la policía”, dijo.
A quienes exigen libertades en el difícil contexto de un régimen totalitario, Gutiérrez envía su mensaje de siempre: “respeto total, absoluto, un mensaje de optimismo, esperanza y resistencia”.
“Parece fácil decir que resistan desde aquí, pero no, siempre es complicado cuando te enfrentas al régimen castrista desde cualquier trinchera. En mi caso, yo que soy artista, donde quiera que he ido desde que vivía en México, hablaba lo mismo que hablo aquí hoy y siempre me busqué muchos problemas por eso”.
No hay vuelta atrás
El cantautor se ofrece para ayudar en lo que pueda a sus hermanos en la isla. “Tenemos las manos y los pies atados, pero habrá que hacer algo para apoyar a la gente en Cuba, que son los que están marcando la pauta histórica en este momento”, dijo.
Reflexiona que “lo que ocurrió el 11 de julio es un parteaguas en la historia de Cuba. Estoy convencido de que es el principio del fin del régimen. Porque después que a nivel colectivo ocurre ese cambio de actitud, para mí eso es indetenible, no hay dictadura que pueda con eso”.