Hanser García, el nadador cubano que llegó a ser el mejor deportista de esa especialidad en el país en la última década, apoya la campaña contra los viajes a Cuba y el envío de remesas.
En un breve video compartido en Facebook, el atleta de alto rendimiento que llegó a participar en una final olímpica, y fue medallista en Juegos Panamericanos, hizo su llamado a no “no apoyar a la dictadura”, que estaría beneficiándose del dinero de los emigrados.
“Los estoy invitando a que no viajen a Cuba. El dinero que estamos mandando, el dinero que estamos llevando es para la dictadura cubana”, aseguró García.
El mejor nadador cubano desde el subcampeón olímpico Rodolfo Falcón, fue claro en su mensaje: “Dejemos de apoyar la dictadura. Por eso… No travel to Cuba”, dijo Hanser García, conocido como “El Pollo”.
El deportista actualmente reside en Estados Unidos, adonde llegó luego de un calvario de problemas con las autoridades deportivas del régimen, que reveló en una entrevista con el economista e influencer cubano Manuel Milanés.
El oficialista Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (Inder) lo mantuvo alejado por dos años de la natación deportiva, luego de una sanción en el 2014 impuesta a García por una discusión con su entrenadora. Además, se convirtió en un atleta regulado e impedido de salir del país.
Entre las represalias que sufrió Hanser, debió entrenar durante ocho meses sin salario. Al final, profundamente decepcionado, logró emigrar y se radicó en Estados Unidos.
Hanser García Hernández, de 31 años, es un gran deportista cubano nadador de estilo libre. Sus primeros resultados los obtuvo en otro deporte, el polo acuático, donde llegó a integrar el equipo nacional juvenil. Luego de su despegue como nadador libre, fue medallista de plata en los 100 metros libres y de bronce en los 50 metros libres en los Juegos Panamericanos de 2011 en Guadalajara.
Por estos días han crecido las iniciativas de emigrados y exiliados cubanos que rehúsan viajar a Cuba mientras se mantenga bajo la dictadura. En redes sociales, varios han quemado o cortados sus pasaportes emitidos por el régimen castrista.
El opositor cubano, Leo Juvier-Hendrickx quemó su pasaporte el 28 de julio último, asegurando que es un instrumento del régimen "para seguir teniendo al cubano libre en un lazo".
Este activista publicó un video en Facebook donde le prendió fuego al documento de identificación. De acuerdo con Juvier-Hendrickx, no se trata de un pasaporte, sino de un "pasapenas".
"Donde quiera que lo sacas las personas te miran como un ciudadano de segunda clase. Un pasapenas que no sirve para entrar en el primer mundo libremente. Un pasapenas lo cual es otra forma de seguir explotando al cubano con su alto precio y su baja utilidad", agregó.
Por último, Leo dijo que renunciaba a la obligación de entrar a su país bajo las leyes de una tiranía.