El 26 de septiembre la prensa oficialista informó que Cuba envió a Venezuela un cargamento de Abdala, su vacuna contra covid-19. Según Cuba, esta vacuna tiene un 92,28% de efectividad. De hecho, el régimen de La Habana se permitió rechazar el ofrecimiento del presidente Biden de enviar vacunas gratuitas para la población, pero afuera de Cuba, la efectividad de la vacuna cubana está siendo cuestionada.
La Academia Nacional de Medicina de Venezuela manifestó a la opinión pública local e internacional, ante la falta de información científica, que desconoce la seguridad y la eficacia de la vacuna cubana y que esta no cuenta con la aprobación de la OMS o de alguna otra agencia regulatoria internacional.
Cuba, por su parte, confirmó la producción de 30 millones de unidades para garantizar la inmunización de la población cubana mayor de 19 años. Aunque no especificó la cantidad enviada a Venezuela, el presidente Miguel Díaz-Canel se hizo eco de la noticia, difundiéndola a través de Twitter.
El régimen de Caracas hizo lo propio y agradeció a través de Delcy Rodríguez, vicepresidenta ejecutiva de la República Bolivariana de Venezuela, quien tuiteó al día siguiente, desde un iPhone, agradeciendo a Díaz-Canel en nombre de Nicolás Maduro: “expresamos nuestro agradecimiento a Cuba y a su Pdte. @DiazCanelB por el envío de un lote de dosis de la Vacuna Abdala para seguir dando la batalla a la pandemia. La solidaridad siempre ha caracterizado la relación entre Cuba y Venezuela”, indicó Rodríguez en su cuenta de Twitter.
El mismo día, la Academia Nacional de Medicina de Venezuela expresó nuevamente su preocupación por el anuncio de la distribución de la vacuna Abdala en el país e instó a las autoridades responsables a publicar las conclusiones de las fases de investigación y validación de la vacuna por parte de la OMS.
En su boletín 41 la Academia expresó que la vacuna cubana “no ha sido aprobada por la OMS ni por ninguna agencia regulatoria internacional”. La institución cuestionó que el gobierno venezolano anunció que para octubre el 70% de la población estará vacunada, pero se desconoce el plan de vacunación a seguir.
Hasta el 24 de septiembre solo el 14.88% de la población elegible había recibido las dos dosis de vacuna, precisó la Academia. Venezuela ha inmunizado a la población con la vacuna rusa (Sputnik V) y con la vacuna china (Sinopharm), ambas verificadas internacionalmente.
Aunque las vacunas cubanas (Soberana y Abdala) no han tenido verificación internacional, Venezuela ha contratado el suministro de millones de dosis desatendiendo las solicitudes de transparencia e información que le hiciera la Academia como institución asesora del Estado.
Por lo anterior, la Academia Nacional de Medicina de Venezuela trasladó su "profunda preocupación" por las consecuencias que puede acarrear la aplicación de la vacuna cubana en los ciudadanos de ese país.