Una jubilada cubana afirmó en un reportaje de la Televisión Cubana que la pensión era insuficiente para cubrir los gastos de un anciano en Cuba.
Una de ellos ante la noticia de que cobrará 1528 pesos dijo: “esto lo estábamos esperando hace mucho tiempo porque era necesario adoptar medidas porque ustedes saben que lo que se estaba ganando no nos alcanzaba”.
Dentro del paquete de medidas económicas que se implementará en el país a partir del primero de enero, como parte de la “Tarea Ordenamiento” se concibe el aumento de las pensiones a jubilados.
Las pensiones concedidas por el Régimen General de Seguridad Social se incrementan en correspondencia con una escala, que va de 1 528 pesos (para aquellos que cobren actualmente entre 280 y hasta 300 pesos) a 1733 para quienes reciban de 446 a 500 pesos.
Desde ayer y hasta el 30 del presente mes unos 530 mil pensionados recibirán, en las oficinas habilitadas para ello en el país, el pago de sus pensiones incrementadas.
La noticia ha alegrado a muchos; aunque con el incremento de los salarios y pensiones viene un aumento de todos los costos de los bienes y servicios y productos, tanto en el sector estatal como en el privado. Los nuevos precios dilapidarán los bolsillos de los cubanos y los ancianos seguirán siendo los más afectados.
Los pensionados cubanos son un sector frágil económicamente. Las pensiones pagadas por el gobierno por decenas de años de trabajo escasamente les alcanzaban para pagar sus medicamentos, teniendo que recurrir a la ayuda de familiares o vecinos para subsistir.
En 2019 la Resolución 16 dictada por la Ministra de Trabajo y Seguridad Social estipuló un leve aumento que no satisfizo las demandas de los jubilados.
Mientras tanto, la pensión mínima por edad e invalidez total del Régimen General de Seguridad Social, y de los regímenes especiales de los ministerios de las Fuerzas Armadas Revolucionarias y del Interior, será de 1 528 pesos.
