Se trata de una forma de protesta simbólica y homenaje a los presos políticos cubanos, especialmente a aquellos encarcelados tras las protestas del 11 de julio de 2021.
La organización reclamó su liberación inmediata, garantías para su integridad física y el cese de toda forma de hostigamiento, censura y represión contra quienes ejercen el derecho a informar y opinar libremente en la isla.
Sobre las 11 a. m., dos agentes del régimen detuvieron a la doctora Ortega Tamayo; por lo que Fátima Beatriz con el pequeño Daniel José regresaron a la sede de la UNPACU.
Inicialmente la prensa estatal dijo que dos bomberos habían resultado heridos cuando intentaban sofocar el siniestro, pero la cifra ha ascendido a cinco