Revelan irregularidades vinculadas con Cuba en el Departamento de Defensa de Sudáfrica

La Unidad de Investigación Especial (SIU) de Sudáfrica reveló graves irregularidades en las adquisiciones del Departamento de Defensa (DoD), particularmente en un controvertido acuerdo de 33,4 millones de rands (casi 2 millones de dólares al cambio actual) para la compra de medicamentos cubanos.

Según el medio Citizen, esta información forma parte de una investigación más amplia que revela la corrupción sistémica en el sector de la defensa.

El Director Nacional de Investigaciones de la SIU, Leonard Lekgetho, informó que el DoD adquirió 930 unidades del medicamento antiviral Interferón Alfa 2B Hebrón de Cuba durante la pandemia de Covid-19.

Según Lekgetho, la compra se realizó sin un proceso de licitación y sin aprobación de la Autoridad Reguladora de Productos Sanitarios de Sudáfrica (Saphra).

Además, el acuerdo se firmó después de la entrega de los medicamentos, lo que representa una violación de las normas de adquisición.

El informe de la SIU revela que solo se utilizaron 15 de las 930 unidades adquiridas y que la mayoría de los medicamentos fueron devueltos a Cuba tras una orden judicial.

A pesar de esto, Sudáfrica no logró recuperar los pagos realizados. La investigación calificó la adquisición como "un gasto infructuoso y derrochador".

Desde 2021, la compra de medicamentos cubanos no autorizados para el tratamiento del Covid había sido motivo de preocupación para las autoridades sudafricanas.

Más allá del escándalo de los medicamentos cubanos, la SIU también expuso irregularidades en Denel, el fabricante estatal de armas.

En 2007, Denel firmó un contrato por 8.300 millones de rands para diseñar y fabricar 264 vehículos blindados, pero hasta la fecha solo se han construido 21 unidades, sin que ninguna haya sido entregada a Armscor.

También se descubrió que parte de los fondos del proyecto fueron desviados para gastos no relacionados, incluidos salarios.

Como respuesta a estos escándalos, algunos de ellos vinculados con Cuba, la SIU realizó 41 derivaciones penales a la Fiscalía Nacional y 23 derivaciones disciplinarias.

Además, inició procedimientos civiles para recuperar fondos malversados.

Recientemente la Fuerza Aérea de ese país canceló el programa de entrenamientos de sus pilotos en Cuba, debido a dificultades logísticas y operativas en la isla.

La Fuerza Aérea canceló oficialmente el acuerdo establecido en 2014 con las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) de Cuba, mediante el cual sus cadetes recibían entrenamiento en la isla, eliminando así una fuente importante de ingresos para el régimen cubano y su estructura militar. 

Sudáfrica ha invertido 359 millones de rands (casi 20 millones de dólares) en este programa de formación con las FAR, según el medio Diario de Cuba.

En octubre de 2024, la contratación de médicos cubanos generó también controversia en Sudáfrica, según un reporte de 14ymedio.

El parlamento local reveló que el Departamento de Salud de Gauteng, provincia donde se ubican Pretoria y Johannesburgo, pagó por error durante un año a siete profesionales cubanos que ya habían dejado el país.

Estos especialistas formaban parte de un grupo de 28 médicos contratados en 2020 para enfrentar el pico de la pandemia de Covid-19.

Su contrato finalizó el 14 de mayo de 2021, pero continuaron recibiendo su salario hasta la misma fecha en 2022. En total, la provincia desembolsó de más 3,9 millones de rands (unos 225.000 dólares), lo que equivale a 557.000 rands por persona (más de 32.000 dólares).

En 2021 el medio sudafricano IOL Reporter reveló que el Departamento de Defensa y Veteranos Militares de Sudáfrica (DDMV, su sigla en inglés) había gastado en la última década más de 1.000 millones de rands (unos 72 millones de dólares aproximadamente) en pagos al régimen para mantenimiento y reparación de equipos de defensa como parte del proyecto Thusano, en detrimento de empresas locales.