Ethel Kennedy ya no se preocupa porque se sepa sobre su simpatía hacía el guerrillero comunista Che Guevara.
El difunto esposo de la matriarca del clan Kennedy, Robert, y su cuñado el ex presidente John F. Kennedy, se enfrentaron a una Cuba que fue satélite en el Caribe de la Unión Soviética. Uno de los hechos más infames y tensos de esa relación, fue la Crisis de Misiles de 1962 cuando Castro aceptó instalar en la isla cohetes rusos que apuntaban a Estados Unidos, aun a costa de provocar un conflicto armado que borraría de la tierra a su pueblo.
Sin embargo, al parecer eso no detuvo a Ethel Kennedy en su admiración disimulada del argentino, por aquel entonces mano derecha de quien se convertiría en dictador tropical por más de 50 años.
El New York Post reveló que la anciana de 92 años de edad, tiene un portarretratos con el rostro de Guevara en un lugar privilegiado de su casa de Palm Beach.
De hecho, su familia dice que ha sido fanática del ídolo comunista durante años, y no se disculpa por eso.
“Mi mamá ama al Che Guevara. Su perro se llama Che”, dijo su hijo Robert Kennedy Jr. al Post. “Mi madre tiene una historia subversiva”, añadió.
La condición de Ethel Kennedy como “camarada” del difunto revolucionario radical fue revelado inadvertidamente cuando su nieta, Mariah Kennedy Cuomo (una de las hijas del gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo), publicó una foto en Twitter de la familia celebrando el cumpleaños de la nonagenaria matriarca en su casa de Florida.
En el fondo, había una imagen enmarcada del difunto Guevara, la más famosa de todas las que existen de él y que fuera tomada por el gran fotógrafo cubano Alberto Korda.
Después de que se publicó la imagen del 11 de abril, la joven Kennedy Cuomo aparentemente se avergonzó y lo borró de Internet.
Pero una fuente lo compartió con el diario neoyorquino, y Robert Kennedy Jr. admitió que su madre no solo era fanática de Guevara, sino también fanática del mayor enemigo de JFK.
“Tenía una muy buena relación con [Fidel] Castro”, dijo Robert Kennedy Jr.
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Aseguró que ella se reunió con el difunto dictador varias veces en Cuba y afirmó que una vez lo convenció de liberar presos políticos.
Durante un evento para conmemorar el 40 aniversario de la Crisis de los misiles en 2002, Fidel Castro “cenó junto a Ethel Kennedy mientras cubanos y estadounidenses, e incluso algunos militares ex soviéticos, bailaron exuberantemente” en el Palacio de la Revolución de La Habana, informó el Boston Globe en ese momento.
El amor de Ethel por el Che parece chocar con las ardientes opiniones anticomunistas, tanto del ex presidente Kennedy como de su esposo, RFK, quien fue asesinado a tiros en Los Ángeles el 5 de junio de 1968, mientras hacía campaña por la presidencia.
JFK también buscó derrocar al régimen comunista de Cuba apoyando la fallida invasión de exiliados cubanos en Bahía de Cochinos, o Playa Girón.
Sin embargo, RFK Jr. dijo que los emisarios de su tío estaban trabajando justo antes del asesinato del presidente el 22 de noviembre de 1963, para resolver su conflicto con Castro y así evitar que Cuba se convirtiera en una plataforma para la Unión Soviética.
Ernesto “Che” Guevara fue un gran ayudante y confidente de Fidel Castro en la etapa guerrillera, aunque se sospecha su distanciamiento por las fuertes críticas que el argentino haría a la Unión Soviética una vez tomado el poder las fuerzas de Castro que empezó a coquetear con el Kremlin.
En 1967, Guevara fue fusilado sumariamente en Bolivia, luego de un combate mientras lideraba un intento de derrocar al gobierno. Con el tiempo, se ha convertido en un ícono anticapitalista para los izquierdistas estadounidenses. Irónicamente la famosa foto que guarda con cariño Ethel Kennedy es una mercancía más, convertida en una moda para ilustrar camisetas, libros, jarras, llaveros y otros productos.