Abogados del gobierno de EEUU defienden a traidor Manuel Rocha, dice Payá

La líder de la plataforma Cuba Decide, Rosa María Payá, lamentó este viernes que abogados del gobierno de Estados Unidos presuntamente defendieran al exdiplomático Víctor Manuel Rocha, condenado por trabajar como agente secreto para la dictadura comunista de Cuba.

Payá participó junto a su familia en una audiencia programada por la jueza Beth Bloom en Miami sobre las víctimas del convicto.

"Hemos sido testigos de algo vergonzoso. Hemos visto a los abogados del gobierno de Estados Unidos venir hoy a Corte para defender a un traidor a los Estados Unidos, que es Víctor Manuel Rocha y a un represor del pueblo cubano. Hoy se cerraba el caso criminal contra él (...) El gobierno de Estados Unidos vino a decir que ellos eran la única víctima. Qué vergüenza", expresó.

De acuerdo con la activista, ella y su familia no pudieron expresarse este 21 de junio en la Corte porque a discreción de los funcionarios. "No tuvimos oportunidad de hablar en Corte el día de hoy (...) No vamos a parar hasta tener acceso a toda la información, conocer toda la verdad y obtener justicia".

La activista recordó que en el caso de su padre, Oswaldo Payá, "todos los agentes tenían la misión de desinformar" sobre su asesinato.

"Como mínimo, Víctor Manuel Rocha es responsable por tratar de encubrir el asesinato de mi padre mientras estaba trabajando para el régimen cubano", señaló la exiliada.

 

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Payá confirmó que su familia continuará el caso contra Rocha por la parte civil.

En abril pasado el exdiplomático estadounidense fue condenado a 15 años de prisión.

Inicialmente Bloom rechazó un acuerdo de culpabilidad por falta de restitución para posibles víctimas y la desnaturalización para Rocha, pero finalmente aprobó el acuerdo modificado, después de que se agregaran disposiciones sobre restitución y desnaturalización civil.

Se le acusó de actuar como agente extranjero en lugar de espionaje, lo que facilitó llegar a un acuerdo entre los fiscales y Rocha.

Rocha estaba acusado de 15 cargos por seis delitos, que hubiera implicado una pena máxima de cárcel de 60 años.