Como vocero del gobierno, José Ramón Cabañas Rodríguez, director del Centro de Investigaciones de Política Internacional de Cuba, trató de defender la tesis de que "la emigración es un proceso común en todo el mundo" y de que en el caso cubano es un tema "muy complejo" con "alta dosis de politización".
Cabañas Rodríguez afirma que la migración de los cubanos no se debe a "que no compartan el modelo político", alegando que en el destino "hacen una vida de migrantes económicos, no se mezclan con ningún plan de agresión a Cuba, no militan en ningún partido político, ni redactan una plataforma para construir otro tipo de sociedad".
Sin embargo, en sus declaraciones omitió deliberadamente las cifras de migrantes cubanos que en el último año han arribado por tierra a la frontera entre México y Estados Unidos, las cuales constituyen un récord histórico, así como lo es el total de balseros que han sido interceptados por las autoridades migratorias o el monto de cubanos desaparecidos durante su trayecto por mar o tierra.
Según Cabañas Rodríguez, las medidas migratorias de disminuir la presencia de personal consular y de regular los vuelos chárter han sido utilizadas como una "herramienta de presión social sobre Cuba", a lo que añade que la principal causa del volumen actual de migrantes cubanos se debe al "bloqueo".
Asimismo declaró que la emigración de los cubanos es legal porque "salieron con un pasaporte hacia otro destino", pero que intentan llegar a los Estados Unidos de forma "irregular" e "indocumentada". De esta forma el vocero del régimen busca eximir de culpa al gobierno cubano.
Cabañas trató de involucrar a la nación norteamericana en las operaciones de tráfico que se realizan diciendo: "No sé si hay un vínculo directo entre algún traficante y alguna autoridad en los Estados Unidos pero el único beneficiado, la única gente que ha hecho mucha plata con todo esto, son los traficantes y todos los que dan servicios en este movimiento de migrantes indocumentados".
Por último, aseveró que el verdadero beneficio para "miles de personas" se ha logrado cuando se establecen las "mesas de negociaciones", lo que dejó entrever que el gobierno cubano busca la vía para establecer nuevos acuerdos con Estados Unidos.