Autoridades cubanas anunciaron que retomarán la producción de tres medicamentos contra el cáncer, si bien la producción se mantendrá inestable debido a la falta de materias primas, precisó Granma.
Del total de sueros citostáticos producidos por plantas locales, cuatro estaban afectados por la falta de suministros. Tres de ellos (Paclitaxel 300 mg/bulbo, Metotrexato 50 mg/bulbo, Fluorouracilo 500 mg/bulbo) comenzarán a distribuirse este mes. Según el medio, estos cuentan con materia prima en las plantas productoras, mientras que el Docetaxel 80 mg/bulbo continuará en falta por el momento.
Los antineoplásicos Metotrexato 50 mg y Paclitaxel 300 mg, empleados en padecimientos como leucemia, enfermedades autoinmunes, carcinomas y sarcomas, entre otros, se encontraban en falta desde hacía casi un año.
En el caso del Metotrexato, existe una producción en proceso de ser liberada para comenzar esta semana su distribución por hospitales. La materia prima garantiza una cobertura de tres meses.
Precisa el reporte que también comenzó la producción del Paclitaxel 300 mg con una cobertura para alrededor de 70 días, que debe extenderse a partir del próximo arribo de más materias primas.
Estos medicamentos se fabrican en la unidad empresarial de base (UEB) Citostáticos, de la Empresa Laboratorios AICA, perteneciente a BioCubaFarma y única productora de este tipo de medicamentos inyectables en el país.
De 15 citostáticos que la empresa elabora, cuatro han estado en falta (dos de ellos desde hace más de un año) por “problemas en el financiamiento y la llegada de materias primas y otros insumos” como consecuencia de la pandemia, dijo al periódico Granma Emilio Vallín García, director general de AICA.
“No estamos hablando de medicamentos de soporte, sino de medicamentos esenciales en la terapia de cáncer. Uno solo que falte a la persona que lo tiene que utilizar, provoca un serio problema en su tratamiento oncológico, y disminuye la probabilidad de éxito”, explicó Vallín García.
El directivo agregó que la contratación de los insumos para citostáticos se hace por un año, e incluso hasta por 15 meses, pero el financiamiento se va haciendo en la medida en que va siendo necesario, lo cual condiciona que, cada vez que llegan las materias primas, la cobertura oscile solamente entre dos y cuatro meses, hasta el próximo ciclo logístico y financiero.