El prisionero político Samuel Pupo Martínez, detenido por participar en las protestas antigubernamentales del 11 de julio de 2021 en el municipio Cárdenas, provincia Matanzas, se encuentra en pésimo estado de salud.
Según informó en Facebook la activista Saily Navarro, a Pupo Martínez, de 47 años, se le están engarrotando los dedos de las manos y se le pudren las uñas, lo cual causa mucho dolor durante las curaciones que él mismo se hace, para extraerse el abundante pus.
El opositor cubano, recluido en la prisión de máxima severidad de Agüica, en el municipio matancero Colón, padece además de Esclerodermia o Esclerosis Sistémica (enfermedad degenerativa).
Las medicinas que le facilitan no alivian su dolor, denuncian en redes sociales. En las noches empeora, lo cual le dificulta conciliar el sueño.
Pupo Martínez es diabético y padece de glaucoma progresivo.
En diciembre de 2021, su esposa Yuneisy Santana González también denunció que Samuel se encontraba en estado de salud delicado.
"Le han dado dos hipoglicemias allá dentro. Responsabilizo a Díaz-Canel, a Rubén Remigio, a la Fiscal General y todo el que tenga que ver con que Samuel esté preso", contó entonces.
El activista cubano fue encarcelado en julio anterior cuando frente a la sede del Partido Municipal en Cárdenas subió a un auto volcado y gritó "¡Abajo el comunismo! ¡Patria y Vida!".
Hasta diciembre anterior se desconocía la fecha de juicio para el manifestante del 11J.
Anteriormente en septiembre el instructor penal le comunicó a su esposa que Fiscalía le pide a Samuel una condena de 17 años de privación de libertad.
El juicio se celebrará entre los días 15 y 18 de marzo en el Tribunal Provincial de Matanzas.