La Prensa local de Philadelphia informó este martes que dos de las personas involucradas en el asesinato del fanático del América se entregaron a las autoridades y que se encuentran bajo custodia.
Según el diario The Philadelphia Inquirer, Omar Arce, de 32 años, y José Alberto Flores-Huerta, de 33 años, se acercaron a las autoridades locales para entregarse este lunes por la noche. Ahora ambos enfrentan cargos de por asesinato y asalto.
De los cuatro aficionados que participaron en la brutal golpiza que le ocasionó la muerte a Isidro Cortés, dos están prófugos de la justicia, sin embargo, se mantiene la recompensa establecida por la policía de $20,000 a quien pueda colaborar a dar con el paradero de los sospechosos.
El medio local indicó también que el capitán de la policía de Philadelphia continúa la búsqueda de los otros dos cómplices de Omar y José Alberto que ya fueron identificados como Osvaldo ‘Willie’ Pedraza y Victor Pedraza gracias a los videos de la cámara de seguridad del restaurant Pat’s King of Steaks.
En los videos captados por las cámaras de seguridad se puede apreciar cómo la víctima, Isidro Cortés, junto a su padre vestían una camisa del América mientras que fueron agredidos por un grupo de personas que también portaban el uniforme del equipo mexicano.
La familia de Cortés habla tras su muerte
La ciudad mostró su consternación por el lamentable suceso de la muerte de Isidro Cortés, pero sin duda, la familia de la víctima, que se manifestó, sigue muy conmocionada por cómo se dieron los hechos.
La prima de Cortés, Tania Tepale, ofreció unas declaraciones para CBS Philly en las que aseguró que no entiende cómo Isidro estaba disfrutando de un partido de fútbol y posteriormente terminó muerto.
“Era un tipo educado y muy respetuoso. Siempre fue muy amable con todos los que conoció. Tiene toda una familia que lo amaba” comentó Tepale para el mencionado medio de comunicación.
A pesar de que las autoridades buscan sin descanso a los dos cómplices del asesinato, la familia asegura que está desconsolada.
“Es muy difícil. Es muy difícil procesar esto. Es realmente difícil, incluso, creer lo que sucedió y cómo sucedió. Mientras continúa la investigación por parte de las autoridades, la familia de Cortés está desconsolada. “Era tan joven. Tenía toda su vida por delante”, concluyó Tepale.