El boxeador pinareño Roniel Iglesias dominó totalmente la pelea por la medalla de oro del peso wélter contra el británico Pat McCormack y consiguió así la cuarta presea dorada para la delegación cubana.
El cubano ganó 5-0 en tres asaltos, con decisión unánime de los jueces contra el europeo y sumó así su segundo campeonato olímpico, pues ya se había impuesto también en la lid olímpica celebrada en Londres, en el año 2012.
La jornada del boxeo en Tokio de este 3 de agosto dejó sensaciones divididas. Primero Lázaro Álvarez se quedaba a las puertas de la final, pero conseguía el metal bronceado. Luego el capitán del equipo de púgiles cubanos, Julio César la Cruz, lograba su pase a la discusión del oro e Iglesias culminaba el aporte del boxeo al medallero cubano.
Fue una jornada igualmente de oro para la isla. Mientras la delegación de Cuba continúa su ascenso en el medallero, en un día en la cual también consiguió otra medalla de oro, gracias a los canoístas Serguey Torres y Fernando Dayán Jorge, quienes conquistaron el título en la canoa biplaza a mil metros.
En otras especialidades, el triplista Cristian Nápoles se clasificó a la final de esta disciplina, con el segundo mejor salto de la clasificatoria. Mientras la corredora de 400 metros, Roxana Gómez pasaba a la siguiente ronda, la semifinal. En la lucha greca, caían Ismael Borrero y Daniel Gregorich.
Tras estos resultados, Cuba marchaba en el puesto 13 de la tabla de posiciones, con cuatro medallas de oro, tres de plata y cuatro de bronces. Este miércoles 4 de agosto, la isla pudiera aumentar su cosecha de medallas de oro cuando suba al ring otro boxeador, Arlen López. Cuba debe mantenerse en estos días entre los 15 primeros países del medallero de los Juegos Olímpicos de Tokio.