Un momento de esparcimiento en la zona forestal de Slate Canyon, en Estados Unidos, casi termina en tragedia, después de que el corredor Kyle Burgess se encontró cara a cara con un Puma enfurecido.
El runner salió a correr y en mitad de la montaña se tropezó con unas crías de puma y a pesar de no darle importancia, notó que detrás de las crías apareció la madre. El hombre en vez de huir, lo que hubiera sido fatal para él, comenzó a caminar de espaldas para vigilar los movimientos del felino que le perseguía.
En el vídeo que él mismo captó se puede ver cómo el animal intenta atacar en varias oportunidades, en un intento de alejarlo de sus pequeños.
Se puede observar como el deportista grita, ruge y hasta dice obscenidades, tratando de asustar al animal, que no cedió. La calma del joven es asombrosa, ya que se encontraba en una situación de máximo riesgo.
El audiovisual se alargó durante seis exhaustos minutos, cuando el animal cansado y habiendo alejado al intruso de sus crías se dio la vuelta y se marchó.
La madre “no estaba feliz de verme” dijo Brugess en la descripción del video difundido en Instagram. Los pumas pueden atacar a presas de gran tamaño pero, por regla general, no atacan a los humanos y evitan su presencia siempre que pueden. En el caso de hembras con crías, la situación puede ser diferente cuando el animal adulto interpreta que el humano puede poner en peligro a los pequeños.
