Padre Kenny dirá “NO al comunismo” con su abstención en próximas elecciones cubanas

El sacerdote católico Kenny Fernández Delgado anunció en redes sociales que se abstendrá de votar en las próximas elecciones en Cuba, convocadas para elegir los delegados a la Asamblea Municipal del Poder Popular, un órgano controlado por el Partido Comunista.

“Desde ahora les voy diciendo que llevo más de 15 años sin votar por ningún delegado y no votaré de nuevo hasta que haya en Cuba una verdadera democracia con transparencia electoral”, afirmó en Twitter el joven sacerdote.

“Mi abstención es un NO al comunismo. Esa es mi opinión, respeto la tuya”, agregó Fernández Delgado, una de las voces dentro de la Iglesia católica más críticas con el gobierno de Miguel Díaz-Canel, presidente designado en 2018 por el general Raúl Castro.

Kenny Fernández, párroco del poblado de Madruga, en la provincia cubana de Mayabeque, respondió con sus declaraciones a la invitación de las autoridades a participar en los comicios municipales del próximo noviembre.

El Consejo Electoral Nacional (CEN) cubano informó esta semana sobre la convocatoria del Consejo de Estado “a los electores de la República para las elecciones municipales que se efectuarán para elegir a los delegados a las asambleas municipales del Poder Popular”.

Los comicios para “elegir por el plazo de cinco años a los delegados a las asambleas municipales del Poder Popular se efectuarán el día 27 de noviembre de 2022”, agregó el CEN.

A propósito del referendo convocado en septiembre último para aprobar el nuevo Código de las Familias, un informe auspiciado por la organización internacional Transparencia Electoral explicó que las votaciones en Cuba se realizan en “un contexto cerrado, autocrático, con una carta magna que ilegaliza el pluripartidismo y establece que es un país con un modelo de partido único”, donde a los ciudadanos les “queda muy poco para elegir”.

Transparencia Electoral señala la falta de instancias de control y auditoría en el sistema electoral cubano, y fallas “de naturaleza estructural, ya que al estar ilegalizado cualquier otro partido u organización de la sociedad civil que no apoye al gobierno, los ciudadanos independientes no pueden auditar el proceso, que recae totalmente en el PCC y las organizaciones de masas que constitucionalmente están subordinadas a este”.