Cubano detenido en Aeropuerto de Miami por robo de un reloj de más de mil dólares en “Duty Free”

El cubano Eliécer Humberto Cotolorca, residente en Miami, fue detenido en un avión de American Airlines que cubre la ruta hacia La Habana luego de robarse un reloj en un “Duty Free” del Aeropuerto Internacional de Miami.

El reporte de la televisora local AméricaTeVe informa que el reloj era de la marca Tissot, modelo T-Touch, y que estaba valorado en 1075 dólares americanos. La policía del Aeropuerto tenía un video claro del acusado donde se le veía llevarse el artículo sin pagar.

Los agentes del orden rastrearon al ladrón de origen cubano hasta la puerta D-16 del vuelo Miami-La Habana de American Airlines y lo ubicaron en el asiento 20F antes de la salida de la nave. Luego lo sacaron del vión escoltado y, una vez afuera, el individuo le entregó el reloj al gerente de la tienda del “Duty Free”.

El medio detalla que el acusado refirió que “no era su intención” llevarse el reloj, pero que le dijeron “que su vuelo ya salía”. No obstante, la gerencia de la tienda donde sucedió el robo explicó a la prensa que presentarían cargos contra el cubano.

Finalmente, la policía de Miami-Dade puso a Cotolorca bajo custodia y lo transportaron a la cárcel TGK.

“Qué vergüenza, cuando su familia en Cuba quedó esperándolo en el aeropuerto y luego ver esta noticia, al final tuvo que devolver el reloj, en juicio y sin moral” y “Para llegar a Cuba a especular con el reloj, robar y en un aeropuerto”, fueron algunos de los comentarios de usuarios en redes sociales.

En 2021, cinco personas de origen cubano fueron arrestadas por las autoridades de Miami, acusadas de robar cables de AT&T que luego eran vendidos en el mercado negro en unos 30 mil dólares, informaron medios locales.

Los acusados, identificados como Iván Pérez García, de 55 años, Eric González Pando, de 24, Francisco Alberto Gutiérrez, de 50, Yordán Ramírez, de 41, y Ermes González Pando, de 43, conformaban una banda que realizaba un plan de robo en una calle de Homestead durante las madrugadas. 

Los sujetos vestían con overoles que los hacían parecer una cuadrilla de trabajadores de AT&T y, durante la madrugada, usaban camiones similares a los de la empresa para sustraer los cables de cobre que conducen el Internet y la televisión hasta miles de hogares, por lo que dejaban a los afectados sin servicio.