Skip to main content

Habla por primera vez judoca cubana que desertó en los Juegos Olímpicos de París

La judoca cubana Dayle Ojeda, de 30 años, quien abandonó la delegación cubana durante los Juegos Olímpicos de París 2024, dio su primera entrevista desde Valencia, España.

Image
Judoca cubana en España
Foto: Federación Valenciana de Judo | Dayle Ojeda. (Foto: Federación Valenciana de Judo)

Creado: August 17, 2024 1:24am

Actualizado: August 19, 2024 7:47am

La judoca cubana Dayle Ojeda, de 30 años, quien abandonó la delegación cubana durante los Juegos Olímpicos de París 2024, dio su primera entrevista desde Valencia, España.

En una entrevista de este viernes con la Federación Valenciana de Judo, Ojeda explicó que la decisión no fue fácil, pero que está convencida de que fue la mejor para su futuro.

“Fue difícil tomar la decisión ya que nadie está preparado para dejar atrás su vida. Es duro dejar a mi familia, amigos, pareja y, sobre todo, el lugar donde uno nace sin poder decir adiós. Ni siquiera a mis compañeros. Pero, insisto, fue lo mejor y no me arrepiento porque fue la mejor decisión. Estoy segura de ello”, dijo en la entrevista.

Ojeda apuntó que conocía del alto nivel de judo en la región y la reputación del Centro de Alto Rendimiento, antes de tomar al decisión de escapar de París y dirigirse en autobús a Valencia, donde buscará obtener asilo político y competir por España.

“Mis deseos y objetivos eran claros, y sabía que el nivel de judo en Valencia es muy alto. Me hablaron muy bien del Centro de Alto Rendimiento y sabía que era probable que me ayudaran, como hicieron con el equipo ucraniano en un momento crítico e importante. Además, conocía a Ayumi Leiva, mi compañera de equipo en la selección nacional de Cuba y amiga. Sabía que también me darían su apoyo incondicional, algo por lo que estoy eternamente agradecida”, dijo.

Sobre sus motivaciones para dejar Cuba expresó: "Son muchísimos los motivos, pero las ganas de poder mejorar como atleta y poder sentir que puedes crecer sin que te detengan o te digan que no puedes, fueron algunos de esos motivos. Tengo ganas de sentir que tu trabajo y tu esfuerzo son valorado. Mis deseos de superación personal y profesional fueron los que me impulsaron, además de mi madre, que es mi mayor motor, y me apoyó mucho”.


Deportes