Un Calamaro en estado puro se estrena en Cap Roig

Andrés Calamaro, conocido cantautor, músico y compositor argentino, ha subido por primera vez al escenario de los Jardines de Cap Roig, en Calella de Palafrugell, para presentar su show dentro de la gira Agenda 1999, en la que rinde tributo a uno de sus discos legendarios, “Honestidad Brutal”, que cumple 25 años. 

Calamaro, de 62 años, nacido en Buenos Aires y con más de cuatro décadas de carrera, girará este año por una veintena de ciudades españolas y, en el incomparable marco de Cap Roig, ha escogido “El día de la mujer mundial” para inaugurar, tras un “Hola Gerona buenas noches”, el concierto organizado por Clipper’s Live con el impulso de CaixaBank, con 2.000 asistentes al concierto.

Andrés Calamaro, conocido cantautor, músico y compositor argentino | EFE

El icónico músico, que lideró Los Rodríguez y atesora una larga trayectoria como solista, empezó tan puntual que lo hizo un minuto antes de lo previsto y fue encadenando temas como “Más duele”, “Cuando te conocí” y “Te quiero igual”, en la que parte de los casi 2.000 asistentes al concierto, muchos de los cuales son originarios de diferentes países hispanoamericanos, se han puesto en pie bailando.

Estas fueron algunas de las 14 canciones que interpretó de “Honestidad Brutal” (1999), un disco de 37 canciones, una por cada año que tenía, el más largo de la historia del rock argentino, considerado por algunos críticos como su mejor trabajo, en el que mostró su ritmo veloz de composición y en el que expresaba su pena por el fin de una relación.

El cantante, que de inicio salió al escenario con una camisa naranja y una cinta en la frente, antes de “La bomba” se quedó en camiseta negra y en varias canciones tocó la guitarra e, incluso, en alguna ocasión, los teclados.

Andrés Calamaro, conocido cantautor, músico y compositor argentino | EFE

“Los aviones”, “La parte de delante” y especialmente “Maradona”, canción que en 1998 dedicó e interpretó con la estrella de fútbol argentina, hicieron levantar al público de sus butacas.

Gran mérito le reconoció a su banda habitual, a la que presentó a mitad de actuación: Julian Kenevsky y Brian Figueroa en las guitarras; Mariano Domínguez, en el bajo y coros; German Wiedemer, al piano y Andrés Litwin, en la batería. 

Un Calamaro con muchas ganas de hablar al público se dirigió a él en una decena de ocasiones, ha recordado a Dani Zamora, el quinto de los Rodríguez, que nació y murió en Palafrugell; ha mandado un saludo a Stuani, el jugador de fútbol del Girona, y a la belleza de la ciudad, entre muchas otras referencias.

También se mostrí contento de estar en ese escenario, por el que antes han pasado, dijo, sus amigos de Estopa y el cantante estadounidenses John Fogerty.

Un supersticioso Calamaro, que evita el 13 en su 'setlist', cantó temas de seis de sus álbumes, como “Crímenes perfectos”, de Alta Suciedad (1997); una pegadiza “Tuyo siempre”, de El Salmón (2000), y “Cuando no estás”, de Bohemio (2013), momento en el que cogió en brazos para subir al escenario a un niño de unos 10 años, Jan, que cantó junto a él.

Ya con la gente en pie llegó el turno de una esperada y aclamada “Flaca” y de “Paloma”, con las que pretendía poner fin a su show, pero, tras ser aclamado por los “oe, oe, oe” de sus fans, salió de nuevo al escenario para acabar con “Estadio Azteca” y “Los chicos”, que en 2007 dedicó a sus amigos músicos.

Mientras la banda se despedía, luego de más de 100 minutos de actuación, en el escenario sonaba un pasodoble acompañado por los “Olé” de los asistentes.

Después de esta actuación en el escenario de los jardines botánicos de Cap Roig, el roquero bohemio viajará a Palma, Albacete, Murcia y Tarragona en septiembre.

Por otra parte, el sábado será el turno de Chris Isaac en el escenario de Palafrugell.