Skip to main content

Atleta cubana que se fugó en París 2024: “Miraba atrás por si me seguían”

La judoca cubana que escapó en la capital francesa quiere ir a los Olímpicos de Los Ángeles para “devolver a España” lo que le ha dado

Image
Judoca Ojeda desde Valencia
El Mundo | Judoca Ojeda desde Valencia

Actualizado: Mon, 10/07/2024 - 09:08

La judoca cubana Dayle Ojeda, de 31 años, quien abandonó la delegación cubana antes de la apertura de los Juegos Olímpicos de París 2024, contó a la prensa española cómo fue la fuga y sus perspectivas en España a futuro.

"Había pensado en ello varias veces. En Cuba no tenía opciones de competir, tenía muchas dificultades para entrenar y sabía que ese era el momento. Del 6 de mayo al 26 de julio de este año estuve en París ayudando a las judocas de mi país clasificadas para los Juegos Olímpicos y el día de la inauguración, cuando llegué al aeropuerto para regresar a La Habana, me separé del grupo", contó.

La habanera, entre 2019 y 2020, logró un Campeonato Nacional, participó en los Grand Slam de París y Dusseldorf, y soñaba con un futuro mejor. Pero en su categoría, de más de 78 kilos, Cuba tenía a Idalys Ortiz, cuatro veces medallista olímpica y campeona en Londres 2012, y no había recursos para ambas.

"A los Juegos Olímpicos viajan más, pero al resto de competiciones solo van las primeras figuras de Cuba, apenas tres o cuatro judocas. No había recursos para nada, no había manera de desarrollar una carrera deportiva y no tenía medios para vivir. Recibía un salario mínimo que no alcanzaba para las cosas fundamentales y me tenían que ayudar mis padres. Solo había dos caminos: o salir de Cuba o dejar el deporte", agregó.

Respecto a la fuga de la delegación a finales de julio, Ojeda detalló que “estaba nerviosa, miraba atrás por si me seguían, no sabía qué pasaría”.

“Por suerte unas amistades me recogieron en el aeropuerto. Después cogí un autobús hasta Barcelona, me quedé allí unos días con una amiga y luego llegué a Valencia, donde me esperaba Ayumi”, añadió.

La judoca aseguró que la preparación en España y en Cuba no tiene punto de comparación, pues en el país europeo no solo hay más recursos sino mejor sistema de entrenamiento.

“En primer lugar porque aquí la preparación física es más profesional, está más estudiada, hay más recursos. Y en segundo porque aquí hay muchísima gente de nivel. Hay muy buenas judocas en España y, además, cada semana viene gente de nivel de otros países. Solo llevo aquí dos meses, pero noto que he mejorado más que nunca en mi vida”, aseguró.

Finalmente, la judoca quiere a futuro hacerse con alguna medalla en el judo español para llamar la atención de los decisores y le den la ciudadanía exprés, y así representar a España a nivel internacional.

“Mi motivación es trabajar al máximo para estar preparada cuando llegue mi momento. Me encantaría poder ir a los próximos Juegos Olímpicos y devolver a España toda la ayuda que me está dando", concluyó.