Veintitrés días después de la irrupción de agentes del régimen en la vivienda de Damas 955, en la Habana Vieja, para forzar al Luis Manuel Otero a dejar su huelga de hambre y sed, los derechos del opositor continúan siendo vulnerados en un hospital de La Habana. Sin embargo, pretenden manipular a la opinión pública mediante la publicación de un video, el quinto relacionado con el caso, para hacer creer que el artista disidente está en perfecto estado de salud.
En las imágenes difundidas este martes es evidente que Otero Alcántara fue grabado, una vez más, sin su consentimiento. Se muestra a Luis Manuel como un reo custodiado, al que los represores sacan a un patio de la prisión para que tome un poco de sol.
Está el coordinador del Movimiento San Isidro (MSI) caminando por un espacio al aire libre del Hospital Calixto García, pero nunca solo, sino acompañado de una supuesta enfermera. De este quinto video que el régimen publica durante la reclusión del artista también se desconoce su fecha.
Lo cierto es que Otero permanece retenido e incomunicado por órdenes de la Seguridad del Estado, en instalaciones del Ministerio de Salud Pública, específicamente en una sala de psiquiatría del Hospital “General Calixto García”, cercado por un despliegue militar cuyos agentes impiden que visiten al artista.
“Qué derecho y qué ética tienen aquellos como aquel [vocero] Humberto López (hombre servil y triste) para criticar que los filmen en las calles, cuando practican esta grabación y otras, a escondidas para intentar mostrar que no hay torturas… que el 'paciente' vive, que todavía camina y hace incluso una flexión...”, comentó Michel Matos, uno de los coordinadores del Movimiento San Isidro (MSI).
Luego de ver el video del momento, Matos reflexionó en sus redes sociales: “Esto muestra algo muy claro. La actuación mafiosa y por encima de cualquier ley de la Seguridad del Estado cubana, representante del partido único y de algunos militares déspotas”.
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El activista señala que cuando un Estado o institución quiere probar su versión en un caso como el de Otero, lo normal es que se llame “a la prensa nacional y se entrevista y se pregunta todo al preso-paciente, teniendo su consentimiento además”.
Por el contrario, “este accionar aparentemente sutil muestra todo, quienes son, cómo operan... y hasta donde están dispuestos a llegar. Esto si es un show mediático, esto es y representa la más alta bajeza moral de un régimen político y cualquiera de sus representantes...”
La nueva estrategia de régimen es publicar pequeños audiovisuales, utilizando perfiles en redes sociales. Esta vez fue quien se identifica como “Kamilita Cuba”, que al parecer es uno de los trolls que suelen utilizar los agentes de la policía política, ocultos detrás de perfiles falsos de Facebook.
“Miren a Luis Manuel, me lo mandó una amiga enfermera del Calixto [García], ya yo no sé qué pensar, mírenlo zorreando con la enfermera. Yo no creo ya en él, pensé que sería nuestra salvación, pero me equivoqué”, postearon junto al video.
El intelectual Antonio José Ponte, señala a propósito del reciente “modus operandi” de la policía política “filtrando” videos manipulados o incompletos mediante cuentas falsas o anónimas, que “estos voceros vienen a suplantar a los usuales voceros del régimen, que transmiten propaganda en lugar de información. A diferencia, Seguridad del Estado no parece interesada en moldear la opinión o imponerla, sino en intimidar públicamente”.
Ponte razona, en una columna de opinión publicada en el independiente Diario de Cuba, que a la Seguridad “le incumbe menos la construcción de una verdad oficial que la exhibición de poder”.
