Túneles bajo cuarteles militares de Venezuela: otra prueba de injerencia de Cuba

A mediados de octubre salieron a la luz fotos de al menos ocho túneles que han sido construidos en los últimos años debajo de fuertes militares de Venezuela; según las denuncias, la supervisión de Cuba ha estado presente
Túneles bajo de cuarteles militares de Venezuela: otra prueba de injerencia de Cuba
 

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La llegada del expresidente Hugo Chávez al poder en 1999 significó un enlace entre Cuba y Venezuela. El líder murió, pero la estrecha relación entre La Habana y Caracas no. El pasado 15 de octubre, salieron a la luz pública fotos de túneles construidos por el alto mando militar de Venezuela, debajo de las instituciones castrenses del país, con la finalidad de ocultarse o escapar en caso de ocurrir un conflicto bélico. La construcción fue presuntamente asesorada por el régimen de Cuba.

Lo denunció la abogada y defensora de derechos humanos Tamara Suju, a través de videos y fotografías publicadas en su cuenta en Twitter, donde se observan los túneles, unos completos y otros a medio construir. Los mismos se encontrarían en el  621 batallón de Acondicionamiento de Ingeniero, en el estado Lara; en el Fuerte Mara, ubicado en el estado Zulia; debajo de la Compañía de Ingenieros en Machiques, población de Puerto Escondido Santa Rita, estado Zulia; la 14 Brigada de Infantería Mecanizada en Barquisimeto, estado Lara; y al menos cuatro habrían sido construidos debajo de zonas militares de Caracas: Fuerte Tiuna, la Comandancia General del Ejército, el Batallón Caracas y el Cuerpo de Infantería.

Además de las ubicaciones de los túneles, la abogada Tamara Suju indicó que las construcciones fueron realizadas bajo la supervisión del coronel cubano José Álvarez Hernández.

“Bajo tierra. Son construidos para albergar a los jefes del Alto mando de cada estado, Zodi, Redi hasta tenientes coroneles, además de material y equipos bélicos. Fueron construidos por Ingeniería del Comando Estratégico Operacional y en este caso, el coronel cubano Álvarez, realizaba la inspección”, indicó Suju.

La también defensora de los derechos humanos aseguró que tiene información de que hay más túneles en planificación, pero que “algunos generales revendieron el cemento y las cabillas”.

 

De acuerdo con un comunicado publicado por la Comisión Presidencial para las Relaciones Exteriores de Venezuela, designada por el presidente encargado Juan Guaidó, este tipo de hallazgos revelan el “indiscutible el papel que ha venido jugando Cuba en la transformación de la Fuerza Armada venezolana”.

Asegura que luego del Golpe de Estado del año 2002, Hugo Chávez “abrazó el proyecto revolucionario de Fidel Castro con el propósito de generar una alianza económica, política, internacional y, especialmente, militar”.

La Comisión Presidencial explica que desde la llegada al poder de Hugo Chávez el papel de Cuba en el ejército venezolano y los organismos de inteligencia se han incrementado de forma constante. “La doctrina militar bolivariana propuesta por Chávez es una copia del modelo militar castrista, donde la defensa popular y la guerra de guerrilla son elementos fundamentales”.

Según la Comisión, en el año 2007, un discurso dado por el expresidente Hugo Chávez durante el Consejo de Defensa del ALBA, reveló lo que se venía de la alianza con Cuba: “Es el momento de conformar una estrategia de defensa conjunta, equipamiento conjunto, apoyo militar y no sólo militar; inteligencia, contrainteligencia, en preparación de nuestro pueblo para la defensa, para que nadie se vaya a equivocar con nosotros”, dijo.

20 años de una alianza que no termina

 

Chávez asumió la silla del Palacio de Miraflores el 2 de febrero de 1999. Tres años después enfrentó un intento de golpe de Estado el 11 de abril de 2002. De acuerdo con información de Reuters, luego del acontecimiento, Fidel Castro le sugirió al presidente venezolano generar un convenio para que funcionarios cubanos tuvieran acceso a la Fuerza Armada Nacional del país con el fin de reformarla, y también espiarla.

Estos convenios quedaron plasmados en documentos revisados ​​por Reuters, que fueron firmados en mayo del 2008, y tenían las siguientes premisas: entrenar a soldados en Venezuela; revisar y reestructurar partes del ejército venezolano; entrenar agentes de inteligencia venezolanos en La Habana; y cambiar la misión del servicio de inteligencia de espiar a rivales extranjeros a la de vigilar a los propios soldados, oficiales e incluso comandantes de alto rango.

El primer acuerdo, según los documentos, hizo que los agentes de inteligencia venezolanos se formaran para “el descubrimiento y enfrentamiento a la labor de inteligencia y subversiva del enemigo”. El segundo acuerdo autorizó a los funcionarios cubanos a supervisar la “asimilación” y la “modernización” del ejército de Venezuela.

Esta preparación para descubrir actitudes subversivas y mejorar la capacidad de inteligencia, llevó a la reformación de la Dirección de Inteligencia Militar (DIM). Chávez ordenó el cambio de nombre de este organismo, que forma parte del Ministerio de la Defensa, y lo llamó Dirección General de Contrainteligencia Militar, o DGCIM. La nueva misión del organismo militar también se reformuló a: “ejecutar operaciones de contrainteligencia que impidan, corten y prevengan las actividades de espionaje e inteligencia enemigas”.

Testimonios de familiares de los militares que han sido detenidos en los últimos años por la Dirección de Contrainteligencia Militar indican que sus funcionarios usan la tortura para disminuirlos. El informe de la Misión de la ONU, publicado el 16 de septiembre, habló con víctimas y familiares y pudo reunir y verificar algunos métodos de tortura, tales como: descarga de corriente en los genitales, cortaduras en las plantas de los pies, golpizas, asfixias, permanecer en posturas incómodas esposados durante días; también usan habitaciones para encerrar a los militares alzados durante largos períodos para ejercer presión psicológica.

 

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